Marine Le Pen y Vladímir Putin, durante el encuentro que mantuvieron en el Kremlin el 24 de marzo de 2017. / MIKHAIL KIMENTYEV / AFP / SPUTNIK
En vísperas de la primera vuelta de las elecciones legislativas en Francia, el presidente de Rusia Vladímir Putin mostró su apoyo a Marine Le Pen, la líder del Reagrupamiento Nacional (RN). “El pueblo de Francia busca una política exterior soberana que sirva a sus intereses nacionales y rompa con el dictado de Washington y Bruselas”, ha escrito en la red social X el jefe de comunicación del Ministerio ruso de Exteriores, Andréi Nastasín. “Los dirigentes franceses no podrán ignorar estos profundos cambios en las actitudes de una vasta mayoría de los ciudadanos”. El texto va acompañado de una foto de Le Pen.
Un apoyo que no ha gustado mucho a la líder de RN, que lo calificó este jueves de “provocaciones de los rusos” y de “injerencia”. “No soy responsable de este tipo de provocaciones rusas contra Francia y contra Emmanuel Macron”, subrayó Le Pen en una entrevista al canal BFMTV cuando se le preguntó por las declaraciones de las autoridades rusas.
Sobre todo, se quejó de que responsables de otros partidos se lo echen en cara, como el candidato socialista a las europeas, Raphael Glucksmann, que en otra entrevista dijo que el RN es “una quinta columna de Vladímir Putin”.
«En una democracia, es vergonzoso» que se utilice «esa violencia» y que se traté como «parias» a «los votantes de RN», denunció la líder de la extrema derecha, que aseguró que si llegan al poder, «un Gobierno de RN no tratará así a la oposición».
Le Pen marca distancias con Putin
Desde la gran invasión rusa de Ucrania de 2022, Le Pen trata de marcar distancias con Rusia y con su presidente. Pero hasta hace unos años, la líder del RN se declaraba admiradora de Putin y su partido obtuvo en 2004 un crédito millonario de un banco ruso, que ya ha devuelto. Hay afinidades ideológicas por la defensa de la identidad nacional y la soberanía y los recelos hacia EE UU, la UE y la OTAN. Y también abundantes declaraciones pasadas en las que los lepenistas apoyaban acciones como la anexión rusa de Crimea en 2014.
Hoy esta proximidad reciente resulta incómoda para el RN, que se ve más cerca que nunca de gobernar Francia, miembro de la UE, de la OTAN y apoyo militar y económico de Ucrania ante la agresión de Rusia. No obstante, el partido francés ha hecho hincapié en que, si llega al Gobierno, no autorizará ni el envío de tropas o instructores a territorio ucraniano, como ha barajado Macron, ni la entrega de misiles de largo alcance con los que Kiev podría atacar en profundidad a Rusia.