En un nuevo movimiento en la guerra comercial, China ha lanzado una investigación antisubsidios sobre las importaciones de productos lácteos provenientes de la Unión Europea (UE). Esta medida es una respuesta directa a los aranceles impuestos por Bruselas a los vehículos eléctricos fabricados en el país asiático. El Ministerio de Comercio de China ha dado a conocer hoy esta decisión, que sigue a una investigación similar iniciada anteriormente contra el cerdo europeo.
Investigación sobre los productos lácteos
La solicitud para investigar los productos lácteos fue presentada por la Asociación de la Industria Láctea de China el pasado 29 de julio. La pesquisa se enfocará en las importaciones realizadas entre abril de 2023 y marzo de 2024, así como en los posibles daños al sector lácteo chino desde 2020 hasta 2024. Se examinarán productos como queso fresco, cuajada y nata, además de los efectos de las subvenciones europeas a la industria láctea en países como Irlanda, Austria, Bélgica, Italia, Croacia, Finlandia, Rumanía y República Checa.
Reacción de China a los aranceles de la UE
La investigación sobre los productos lácteos se suma a las acciones previas contra las medidas comerciales de la UE. A mediados de julio, China comenzó una investigación antidumping en respuesta al «exceso de capacidad» del cerdo europeo, un asunto que afecta particularmente a España, el principal proveedor. En 2023, China importó productos porcinos por valor de 6.000 millones de dólares, siendo la UE, con España a la cabeza, su principal fuente.
Demanda ante la OMC
A principios de agosto, China presentó una demanda ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) en contra de los aranceles impuestos por la UE a los vehículos eléctricos chinos. El gobierno chino argumenta que estos aranceles, que podrían volverse permanentes en noviembre, «no tienen una base fáctica y jurídica sólida» y constituyen una «violación grave» de las normas comerciales de la OMC. Las subidas arancelarias provisionales, que entraron en vigor el 5 de julio, se añadieron al 10% ya existente. La Comisión Europea ha ajustado la propuesta para estos aranceles, estableciendo un tipo máximo del 36,3% frente al 37,6% inicialmente propuesto, mientras que las tarifas para las empresas investigadas, como BYD y Geely, se han modificado ligeramente.
Ajustes en los aranceles y reacciones de empresas
Los fabricantes chinos que colaboraron en la investigación, pero no fueron incluidos, enfrentarán un arancel adicional del 21,3%, superior al 20,8% propuesto inicialmente. Tesla, por su parte, ha solicitado un análisis específico de los subsidios y la Comisión Europea ha decidido imponerle un arancel adicional individualizado del 9%.