En un evento celebrado en 2018, Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, comenzó a establecer relaciones clave con la Fundación La Caixa, que posteriormente financiaría su controvertida cátedra en la Universidad Complutense de Madrid. Este acto, apoyado por la Fundación La Caixa en Madrid, ha sido objeto de escrutinio judicial por el juez Juan Carlos Peinado. La conexión inicial se dio en un foro en el que Pedro Sánchez, entonces recién llegado a la presidencia, pronunció el discurso inaugural.
La «Cumbre del Tercer Sector» y su impacto
La «Cumbre del Tercer Sector contra la pobreza infantil», realizada en CaixaForum el 13 de diciembre de 2018, fue un momento crucial para Gómez. Acompañando a su esposo, Gómez aprovechó el evento para establecer los primeros contactos con La Caixa, lo que más tarde resultaría en un apoyo financiero continuo para su cátedra. Según el subdirector de la Fundación La Caixa, Marc Simón, quien testificó recientemente, los vínculos entre Gómez y la entidad se formaron ese día y se mantuvieron sin interrupción.
La financiación y las relaciones empresariales
En 2020, La Caixa comenzó a financiar la cátedra extraordinaria de Transformación Social Competitiva de la Universidad Complutense de Madrid con 15.000 euros anuales, un acuerdo que se extenderá hasta 2024. Marc Simón destacó que la implicación de Gómez en la obtención de fondos fue personal y que siempre actuó con su marido en el cargo de presidente. Además, Simón subrayó que la colaboración entre la Fundación y diversas universidades es una práctica común, lo que llevó a la decisión de financiar el proyecto.
Reale Seguros y su retirada del proyecto
Junto a La Caixa, otras entidades como Reale Seguros también fueron contactadas para financiar la cátedra. Ignacio Mariscal, consejero delegado de Reale Seguros, testificó que Gómez se puso en contacto con él a través de un intermediario y solicitó un encuentro en septiembre de 2020. Aunque inicialmente mostraron interés, Reale Seguros decidió no continuar con el patrocinio debido a que, según Mariscal, «no se daban las circunstancias necesarias» para seguir adelante.
Este entramado de relaciones y financiamiento ha puesto bajo la lupa judicial las gestiones de Begoña Gómez, levantando preguntas sobre la influencia y el acceso que ha tenido en su rol como esposa del presidente del Gobierno.