Imagen: Europa Press
En respuesta a la devastación provocada por las recientes lluvias torrenciales en varias provincias, el Ministerio de Hacienda trabaja en un paquete de medidas tributarias urgentes para apoyar a la población afectada, especialmente en la Comunidad Valenciana. Se anticipan exenciones fiscales, aplazamientos de obligaciones tributarias y suspensiones de impuestos como el IBI, para aliviar la carga económica sobre los damnificados.
El Gobierno prevé declarar hoy, en Consejo de Ministros, las zonas afectadas como «gravemente dañadas» por una emergencia de protección civil, lo cual activará las ayudas necesarias.
Medidas tributarias en el estilo de La Palma
Según fuentes gubernamentales, Hacienda sigue el modelo de apoyo implementado en 2021 tras la erupción en La Palma. La exención de cuotas del impuesto sobre bienes inmuebles (IBI) aplicará a las viviendas y establecimientos comerciales afectados, y también a explotaciones agrícolas y forestales. Los ayuntamientos recibirán compensación por la pérdida recaudatoria a través de los Presupuestos Generales del Estado.
También se esperan reducciones en el impuesto sobre actividades económicas (IAE) para las empresas y establecimientos mercantiles, turísticos y pesqueros en las áreas más afectadas. Aquellos que ya hubieran realizado sus pagos podrán solicitar la devolución de sus aportaciones.
Nuevos plazos y exenciones para los damnificados
Adicionalmente, Hacienda contempla el aplazamiento de determinadas deudas tributarias para personas físicas y empresas con sede en las zonas afectadas, así como bonificaciones específicas en otros impuestos. También se evalúa la concesión de exenciones en tasas de tráfico, como la baja de vehículos dañados y la emisión de duplicados de permisos destruidos.
Para los contribuyentes de Valencia, la provincia más golpeada, se aplazará el segundo pago del IRPF de la Renta 2023. Cerca de 200.000 personas que eligieron el pago en dos plazos podrán beneficiarse de esta medida. La Agencia Tributaria ya ha solicitado a los bancos la suspensión de estos cobros, programados inicialmente para el 5 de noviembre, y se garantiza la devolución rápida en caso de haberlos ejecutado.
Impacto y seguimiento de las ayudas
Con un balance provisional de más de 200 fallecidos y daños materiales incalculables, las autoridades intentan responder a la magnitud de los estragos. Mientras se concretan las ayudas, el Gobierno sigue evaluando los daños en infraestructuras y coordina esfuerzos con equipos locales para restaurar la normalidad.