Carlos Alcaraz y Novak Djokovic protagonizarán el enfrentamiento más esperado de los cuartos de final del Australian Open. Una verdadera final anticipada. 170 días después de la última vez que se midieron en una pista (final de los Juegos Olímpicos de París), los Nº3 y Nº7 del mundo se vuelven a encontrar en un duelo que captará toda la atención de Melbourne.
Ambos jugadores llegan a esta instancia tras mostrar su mejor versión en octavos de final. El murciano superaba con claridad a Jack Draper por 7-5 y 6-1 cuando el británico debió abandonar la partida por molestias físicas, mientras que Nole logró una trabajada victoria sobre Jiri Lehecka por 6-3, 6-4 y 7-6.
“Intento no pensar en lo que ha ganado Novak porque de otra manera no podría jugar. Cada partido es una nueva batalla”, aseguró Carlos en la previa de lo que será el octavo choque frente al ganador de 24 Grand Slams. Djokovic, quien recientemente superó a Roger Federer como el jugador con más presencias en Grand Slams, señaló: “Siempre es especial jugar en esta pista y sentir el apoyo del público. Ahora me preparo para el próximo desafío, que será muy duro”.
El de este martes será el primer enfrentamiento entre ambos sobre pista dura en un Grand Slam. Djokovic, con diez títulos en el Australian Open, buscará reafirmar su dominio, mientras que Alcaraz intentará consolidarse como el nuevo referente del circuito.
Una rivalidad que crece
Djokovic lidera el ‘head to head’ con cuatro victorias frente a tres del español. No obstante, Alcaraz se ha quedado con dos de los partidos más importante entre ellos, como lo fueron las finales de Wimbledon 2023 y 2024.
El último enfrentamiento entre ambos fue en la final olímpica de París 2024, en tierra batida, donde Djokovic consiguió el oro tras un partido épico. “Ese partido fue especial para mí, pero cada duelo con Carlos es diferente. Es un jugador increíble y siempre me motiva enfrentarlo”, comentó el serbio.
El serbio ha sido dominante en pistas duras con dos victorias en sus dos enfrentamientos previos, incluidos los duelos en Cincinnati y las ATP Finals. Sin embargo, la frescura y ambición de Alcaraz representan una amenaza real para el serbio, especialmente en esta etapa de su carrera.