Imagen: El canciller mexicano, Juan Ramón de la Fuente participa este lunes durante una rueda de prensa en Palacio Nacional de la Ciudad de México (México). EFE/ Mario Guzmán
El presidente de Estados Unidos Joe Biden ha puesto en marcha este mismo lunes una serie de medidas a través de la firma de órdenes ejecutivas. Entre otras, Trump ha declarado una emergencia nacional que autoriza el uso de las fuerzas militares en la frontera con México para “asegurar” esa linde y repeler “formas de invasión” incluyendo la migración hacia EE.UU. y el tráfico de drogas.
La orden, firmada en su primer día en el poder y desde el Despacho Oval, ordena al Departamento de Defensa a desplegar personal y “deportar inmediatamente” a todos los migrantes que entren de manera irregular en EE.UU. Trump ordenará a las fuerzas militares que prioricen el «cierre» de la frontera.
El presidente entrante también ha puesto fin a dos programas que fueron creados por su antecesor Joe Biden para disuadir la migración irregular: la aplicación móvil CBP One y el permiso humanitario (conocido como ‘parole’) para ciudadanos de Cuba, Nicaragua, Haití y Venezuela.
Con la aplicación móvil, los migrantes que estaban en territorio mexicano podían rellenar un formulario con sus datos y solicitar una cita para presentarse a un puerto de entrada en la frontera sur. Empezó a funcionar en enero de 2023 y el resulta fue más de 930.000 personas presentándose para que las autoridades procesaran sus casos.
El parole – que consistía en un permiso para viajar a EE.UU. por avión- permitió la entrada de más de 531.000 migrantes de los cuatro países beneficiarios.
En esta línea, Trump emitirá otra orden ejecutiva para reinstaurar el programa ‘Quédate en México’, que obligaba a los migrantes y solicitantes de asilo a permanecer en territorio mexicano mientras se resolvían sus trámites para entrar en Estados Unidos.
Este programa, oficialmente conocido como Protocolos de Protección a Migrantes, entró en vigor en enero de 2019 durante el primer mandato de Trump (2017-2021) y continuó aplicándose en los primeros meses del Gobierno de Joe Biden, hasta que fue eliminado en agosto de 2022.
Otra de las órdenes ejecutivas busca eliminar la ciudadanía por nacimiento para los hijos de inmigrantes en situación irregular, un derecho protegido por la Constitución, que establece que toda persona nacida en territorio estadounidense obtiene automáticamente la nacionalidad, sin importar el estatus migratorio de sus padres.
La reacción de México
El Gobierno mexicano ha rechazado la “medida unilateral” de Trump. “La indicación que nos ha dado la presidenta (Claudia Sheinbaum) es enfatizar que esta es una decisión unilateral que toman ellos, sí lo pueden hacer, (pero) nosotros no necesariamente lo compartimos, de hecho, no lo compartimos», declaró el canciller, Juan Ramón de la Fuente, en la conferencia diaria del Gobierno.
El secretario de Exteriores defendió la estrategia migratoria de México, al citar una caída del 78 % en los arrestos diarios de migrantes en la frontera de Estados Unidos desde diciembre de 2023. La presidenta Sheinbaum adelantó que buscará que el nuevo Gobierno de Estados Unidos conserve algunas políticas migratorias implementadas por Joe Biden, como la aplicación ‘CBP One’ de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, que permite solicitar asilo desde el sur de México.