El antisemitismo en Europa está experimentando un alarmante aumento, según lo informado por diversas organizaciones especializadas. Este fenómeno, que ha ido en aumento durante los últimos quince años, ha alcanzado niveles críticos desde el conflicto desencadenado el 7 de octubre, cuando ocurrió el ataque de Hamás y la consecuente intervención militar israelí en Gaza.
Las comunidades judías en países europeos viven con temor, evitando mostrar símbolos religiosos e identitarios por miedo a agresiones. Este temor se ha visto exacerbado por recientes eventos, como los sucesos ocurridos en Francia y Suecia, que han disparado las alarmas entre las comunidades judías.
En Francia, la policía abatió a un hombre sospechoso de intentar incendiar una sinagoga en Ruan. Este incidente ha puesto en alerta a las fuerzas de seguridad ante un posible repunte de los ataques antisemitas en el país con la mayor comunidad judía en Europa. En Suecia, las autoridades investigan un posible tiroteo cerca de la Embajada de Israel en Estocolmo, lo que refleja la creciente tensión.
El rabino Menachem Margolin, presidente de la Asociación Judía Europea, ha instado a los ministros del Interior de los países comunitarios a tomar medidas para simplificar las denuncias de actos antisemitas, advirtiendo que los casos reportados son solo la punta del iceberg.
Los informes recientes muestran un aumento significativo en la naturaleza e intensidad de los ataques antisemitas, con un incremento del 1.000 % en algunos países desde el 7 de octubre. Esto ha llevado a que el 80 % de los entrevistados judíos en países comunitarios expresen preocupación por su seguridad y consideren la posibilidad de emigrar.
La Agencia de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea ha confirmado que el número de incidentes antisemitas ha alcanzado cotas sin precedentes desde el Holocausto, con algunos países reportando aumentos de más del 400 %. Esta situación ha llevado a la normalización de la presencia de seguridad en lugares judíos, lo que es censurado como inaceptable por parte de las autoridades.
El Informe Mundial sobre el Antisemitismo en 2023 también expresa preocupación por el futuro de la vida judía en Occidente, con un aumento significativo en el número de incidentes antisemitas en países como Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Alemania.