El cambio de mando en el tenis lleva tiempo gestándose y esta tarde dio un nuevo paso adelante con el implacable triunfo de Carlos Alcaraz sobre Novak Djokovic. Ambos se volvieron a encontrar en una final de Wimbledon, pero a diferencia de lo ocurrido un año atrás cuando fuimos testigos de una verdadera batalla a cinco sets, esta vez el murciano no tuvo contemplaciones con el máximo ganador de Grand Slams de la historia. En esta ocasión, no hubo equivalencias y eso quedó demostrado en el marcador: 6-2, 6-2 y 7-6 (4) en menos de dos horas y media de partido.
Con un juego firme desde la línea de base, Alcaraz logró quebrar el saque de Nole en un primer juego que duró más de 10 minutos y ya el set no tendría vuelta atrás. Mantuvo su saque en cada oportunidad y aprovechó al máximo los errores del serbio tanto en la red como en el saque para cerrar el parcial con comodidad.
Los recursos eran todos de Alcaraz. Desde el fondo, en el saque o en la red, el Nº3 del mundo mostraba una solidez contra la cual es muy difícil de jugar. Djokovic no encontraba las formas pese a intentar un estilo más agresivo y así la segunda manga acabó con el mismo resultado que la primera. La superioridad era tan palpable que imaginar una remontada de Nole era prácticamente imposible.
En el tercer set, Djokovic logró quebrar el saque por primera vez y encendió una luz de esperanza que Alcaraz rápidamente se encargó de apagar. Aunque fue el parcial más parejo de los tres, el murciano seguía marcando el ritmo y tomando la iniciativa ante un serbio que hacía lo posible para mantenerse a flote. Un contundente 7-4 en el tie break acabó por darle la más que merecida victoria al bicampeón.
Un lugar entre los grandes
Con su nuevo título, el cuarto en Grand Slams, Alcaraz reafirma su lugar en la elite del circuito y sigue construyendo una carrera que parece no tener techo. Alcanza un ‘Channel Slam’, un doblete de Roland Garros y Wimbledon en el mismo año que solo cinco hombres han logrado: Rod Laver, Bjorn Borg, Rafael Nadal, Roger Federer y Novak Djokovic.
Djokovic sigue buscando su Grand Slam Nº25
Un nuevo título en Wimbledon hubiera significado alcanzar a Roger Federer en la cima de los que más ganaron en la Catedral. También convertirse en el único tenista en conquistar 25 títulos de Grand Slam, lugar que hasta el momento comparte con Margaret Court. A sus 37 años, Nole sabe que las oportunidades se le van acabando y que la nueva camada de jóvenes jugadores será cada vez más difícil de vender. ¿Tendrá otra chance en los grandes torneos?
