El tráiler de Blancanieves muestra el hartazgo con el wokismo de Hollywood que aburre a la audiencia.
Por fin, este fin de semana se lanzó en D23 de Disney el primer trailer de la tan anunciada película de Walt Disney Studios: Blancanieves.
Y la reacción del público no ha podido ser menos acogedora.
Con casi 6 millones de visitas, la cantidad de «dislikes» sextuplica a la de «likes» en YouTube. A simple vista, el tráiler no parece justificar esta reacción negativa tan generalizada; después de todo, tampoco se ve tan mal. Sin embargo, esto es solo el punto culminante de más de tres años de polémicas relacionadas con esta producción.
La Incontinencia verbal de Rachel Zegler
Rachel Zegler es una actriz que es conocida en redes por abanderar todas las causas que el progresismo mediático va poniendo de moda. En 2021, antes de que se anunciara oficialmente su papel como Blancanieves, pero ya vinculada a Disney, Zegler se unió al coro de críticas en Twitter contra Gina Carano, quien había participado en la exitosa primera temporada de *The Mandalorian*. Carano, una actriz con posturas conservadoras, se negó a incluir sus pronombres en sus redes sociales como muestra de apoyo a la comunidad transgénero, lo que provocó la desaprobación de Zegler. Desde su cuenta de Twitter, Zegler criticó a Carano, y sus seguidores intensificaron la controversia con una campaña de acoso en línea contra Carano por sus opiniones divergentes. Pareciera que linchar al que piensa distinto es su actividad preferida.
De hecho, no era la primera vez que Rachel Zegler utilizaba sus redes sociales para atacar a celebridades con las que no coincidía ideológicamente. En este hilo podéis ver cómo se comportaba en esa época la futura princesa Disney.
En el caso de Gina Carano, sus críticas culminaron en un despido injustificado, motivado claramente por diferencias políticas.
Como veremos, Rachel padece de una incontinencia verbal crónica, y este tráiler llega con varios años de retraso debido, entre otras cosas, a su comportamiento.
En la D23 de finales de 2022, Rachel estaba en su apogeo. Por entonces, el wokismo y el *fan-baiting* eran estrategias comunes en las campañas de marketing de Disney y otras productoras. Durante una entrevista con Extra TV sobre su participación en la película, Rachel—recordando que *Blancanieves* es el primer largometraje de animación de Disney, el estudio que la contrató casi 100 años después—no encontró mejor respuesta que despreciar el clásico de 1937, insinuando que «ya no estamos en 1937», como si todo lo nuevo fuese automáticamente superior. Además, calificó de «extraño» que el príncipe fuera un acosador, mostrando un desprecio evidente por la obra original de Walt Disney.
Tampoco perdió la oportunidad de hacer activismo feminista, presentando la película como un hito histórico de empoderamiento femenino durante una entrevista junto a Gal Gadot en la D23 de 2022 para Entertainment Weekly.
De tormenta de polémicas a quebradero de cabeza para Disney
Todas estas declaraciones, viralizadas en el verano de 2023, junto con algunos rumores (como que la película trataba sobre una revolución socialista al estilo Che Guevara, liderada por Blancanieves contra el poder), se sumaron a la filtración del Daily Mail, ue publicó pruebas de fotografía y vestuario del set de rodaje en el Reino Unido. En estas imágenes, se podía ver un elenco muy diverso, el sueño de cualquier departamento de Diversidad, Equidad e Inclusión, compuesto por seis «hippies» y un único actor con acondroplasia.
En 2022, tras una entrevista con el actor Peter Dinklage, en la que expresó su cansancio por los papeles estereotipados asignados a actores con acondroplasia (como si los quisiera todos para él), Disney decidió no utilizar actores con esta condición en la película. En su lugar, optaron por «Siete Criaturas Mágicas», que terminaron siendo este grupo de inadaptados que parecen sacados de un centro de desintoxicación.
Esta filtración, junto con todas las polémicas protagonizadas por Rachel Zegler, provocó una reacción tan cómica y crítica en las redes sociales que la dirección ejecutiva de Disney decidió intervenir y revisar el material producido hasta ese momento.
La situación debía ser tan desastrosa que, en octubre de 2023, Disney optó por dar marcha atrás y anunció que la película, cuyo estreno estaba previsto para marzo de 2024, se retrasaría un año completo. Junto con este anuncio, Disney compartió una imagen de Blancanieves rodeada por siete enanitos, esta vez más parecidos a los originales de la animación clásica, pero realizados mediante CGI.
Por otro lado, lo último que se supo sobre la producción antes de la presentación del tráiler oficial en la D23 de 2024 es que, a lo largo de todo este año, las actrices protagonistas fueron convocadas por la empresa para realizar regrabaciones. Esto encareció el presupuesto de la película, que ya había alcanzado los 300 millones de dólares, elevándolo a casi 400 millones.
Además, la historia se ha reescrito por completo para alinearse con el clásico que todos conocen y aprecian. Sin embargo, el feminismo parece que se mantendrá, aunque mucho más edulcorado, ya que el guion ha sido coescrito por Greta Gerwig, la directora y guionista de *Barbie*.
¿Entiendes ahora por qué hay tantos «dislikes»?
2 comentarios en “Blancanieves: una montaña rusa de polémicas woke”
¡Un artículo real!, gracias
Para mi Zegler no es bonita, pero tampoco es horrible; no es de color, pero tampoco es blanca como para interpretar a Blanca nieves, además, su complexión no es la adecuada para poder interpretar ese rol, ella es muy baja y muy delgada y uno espera una mujer más rolliza, por eso Kristen Stewart tampoco quedó bien en ese papel. De las adaptaciones que están en proceso, Brett Cooper me pareció perfecta, uno siente que está viendo al personaje al mirarla a ella interpretándolo.