El nutricionista Carlos Ríos.ANTONIO NAVARRO WIJKMARK / PAIDÓS
El influencer y fundador del movimiento realfooder español Carlos Ríos ha denunciado en su cuenta de Instagram haber recibido una carta del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030. En esta carta se le advierte sobre sus malas prácticas comerciales y posibles negligencias con respecto a la normativa de publicidad engañosa.
Inmediatamente, Ríos ha cargado contra el Gobierno por el envío de la misiva. “Me acaba de llegar una notificación del Ministerio de Consumo y Agenda 2030 diciéndome que no puedo hacer publicidad desleal”, expresa el creador de contenido en el comunicado. “Vamos, que no puedo hablar mal de marcas de ultraprocesados”, deduce.
El influencer es conocido por defender en redes sociales la “comida sana” y enfrentarse a estas marcas de ultraprocesados que comenta. Asegura, además, que existe un vínculo entre la carta recibida y sus críticas a los políticos por la mala calidad de la comida de los menús en hospitales.
No obstante, la carta que ha recibido Ríos no tiene nada que ver con su trabajo expresamente, sino que se trata de una campaña del propio Gobierno contra la publicidad encubierta. Desde el Ministerio de Derechos Sociales, constataron que las malas prácticas publicitarias siguen muy extendidas entre los influencers, ya que el 70% de ellos hace publicidad engañosa.
Según informa elDiario.es, quien ha preguntado al Ministerio, la campaña se ha hecho en coordinación con la Red de Protección del Consumidor (CPC). Empezó en febrero para advertir a los influencers de que estaban incurriendo en prácticas de publicidad engañosa. Es decir, promocionar productos sin avisar de que tienen un fin comercial.
Informar a los influencers
Los datos de la investigación internacional en la que se estudiaron las cuentas de 40 influencers españoles indican que el 70% de ellos incumple la ley. El equipo que dirige el ministro Pablo Bustinduy (Sumar) no confirma al mismo medio si Ríos está incluido en ese grupo de 40 creadores de contenido. Pero un portavoz asegura que este es el único motivo, el de avisar de que se están produciendo malas prácticas comerciales, por el que el Ministerio ha contactado con el perfil de Carlos Ríos, entre otros.
No obstante, el departamento informa que las comunicaciones fueron informativas para que los influencers “sean los primeros en adoptar buenas prácticas que guíen a esta nueva industria” y de momento no conllevan sanciones, salvo si vuelve a acreditarse un incumplimiento por parte de los influencers.