Estados Unidos está ultimando una propuesta para un alto el fuego y la liberación de rehenes entre Israel y Hamás, en medio de un clima de tensión extrema. La administración de Joe Biden ha expresado su frustración con la postura de Benjamin Netanyahu, calificándola de poco constructiva para alcanzar un acuerdo.
Un aviso en el horizonte
Medios estadounidenses sugieren que la administración Biden podría presentar un ultimátum. ‘The Washington Post’ describe la propuesta como una oferta de «tómalo o déjalo», mientras que ‘Axios’ la califica como la propuesta «final» que se presentará a ambas partes.
Once meses de negociaciones
Durante el último año, Estados Unidos ha liderado intensas negociaciones entre Israel y Hamás, con Qatar y Egipto actuando como mediadores. Altos funcionarios de la administración del presidente, como el secretario de Estado Antony Blinken y el director de la CIA William Burns, han realizado múltiples viajes a la región. Sin embargo, el acuerdo sigue siendo difícil de alcanzar a medida que se aproxima el primer aniversario del ataque terrorista de Hamás el 7 de octubre.
La tensión aumenta con el descubrimiento de rehenes asesinados
La reciente recuperación de los cuerpos de seis rehenes de Hamás, uno de los cuales también era ciudadano estadounidense, ha elevado la presión tanto sobre el gobierno israelí como sobre el gobierno de Estados Unidos. Este hallazgo ha desencadenado protestas en Israel y ha añadido urgencia a la búsqueda de un acuerdo.
En un esfuerzo por acelerar el proceso, el presidente estadounidense se reunió con la vicepresidenta Kamala Harris y su equipo de seguridad nacional para discutir la nueva propuesta. Aunque no se ha fijado un calendario específico, se espera que la oferta se presente en las próximas semanas. Biden ha sido claro en su evaluación, respondiendo con un «no» cuando se le preguntó si Netanyahu estaba haciendo lo suficiente para llegar a un acuerdo.
Críticas a Netanyahu
Familiares de los rehenes, como Adi Alexander, cuyo hijo es miembro del ejército israelí y está en manos de Hamás, han criticado duramente a Netanyahu, acusándolo de prolongar el conflicto por intereses políticos a corto plazo. Alexander hizo un llamado a Estados Unidos para que adopte un enfoque diferente, subrayando la falta de resultados después de once meses de negociaciones.