Ayer fue el día elegido por más de 350 ciudades a nivel global para unirse a la «gran protesta mundial por la verdad», convocada por la líder opositora venezolana María Corina Machado. Las movilizaciones se realizaron en apoyo a los votantes que optaron por la libertad y el cambio en Venezuela, cuestionando la legitimidad de las elecciones presidenciales en las que la oposición alega que su candidato, Edmundo González, ganó frente al oficialista Nicolás Maduro. Los resultados fueron calificados de «fraudulentos» por la oposición.
En España, ciudades como Madrid, San Sebastián y Pamplona, entre otras, participaron en la protesta. María Corina Machado anunció el evento a través de sus redes sociales, en un vídeo en el que instó a los venezolanos a unirse a la manifestación.
En su mensaje, Machado hizo un llamado a aquellos que no se reconocen en la situación actual de Venezuela y que desean que se respete el resultado de las elecciones del 28 de julio, prometiendo que «ganó Venezuela» y exhortando a la participación en la protesta de ayer 17 de agosto.
Las manifestaciones, que se desarrollaron tanto dentro como fuera del país, fueron impulsadas por la falta de transparencia en el proceso electoral. El Consejo Nacional Electoral (CNE) no ha publicado los resultados tres semanas después desglosados por centro y mesa, lo que deja claro la falta de veracidad de los resultados.
En Caracas, María Corina Machado, encabezó una marcha y dirigió un mensaje a los manifestantes jugándose su seguridad. Se dirigió a sus seguidores desde el camioncito electoral de los líderes opositores y reafirmó la victoria de Edmundo González en las recientes elecciones presidenciales. Destacó que «la verdad está en nuestras actas, en nuestros corazones y en cada palabra que pronunciamos en un solo grito de libertad para el pueblo de Venezuela.»
Machado celebró la respuesta mundial a su llamado para la «gran protesta mundial por la verdad,» afirmando que la movilización global demuestra la resistencia del pueblo venezolano frente a la represión. A pesar de la brutal represión de los días anteriores, ella elogió la valentía de los manifestantes y su capacidad para seguir luchando.
En contraste, el régimen de Nicolás Maduro organizó su propia contramarcha en Caracas para apoyar al presidente, mientras que en otras ciudades del país, la policía reprimió las protestas de los opositores al chavismo.
En su discurso, Machado subrayó que la protesta se llevaría a cabo de manera pacífica, utilizando inteligencia, prudencia y resiliencia. Aclaró que la violencia solo favorecería al régimen y que los opositores no atacarían a otros venezolanos.
Machado criticó duramente la falta de transparencia y la actuación del CNE, sugiriendo que la situación actual es una «farsa». Reclamó una verificación independiente internacional para asegurar la transparencia del resultado. También acusó al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de estar confeso de su derrota al no proporcionar detalles numéricos después de tres semanas.
Además, Machado pidió al gobierno de Maduro que muestre las actas electorales y expresó su preocupación por la posibilidad de que se estén imprimiendo actas electorales falsas, que por otra parte no sería tan sorprendente para nosotros viendo lo que está ocurriendo. Llamó al gobierno a demostrar la integridad del proceso y expresó escepticismo sobre la posibilidad de manipulaciones adicionales.
Las protestas, tanto en Venezuela como en ciudades internacionales, reflejan una amplia desconfianza en el proceso electoral y un fuerte rechazo a la continuidad del régimen de Maduro. La falta de resultados claros y la opacidad del proceso electoral han alimentado las demandas de una investigación exhaustiva y un reconocimiento internacional de la crisis política en Venezuela.