Foto: Tommy Sheppard
Escocia ha seguido la tendencia del conjunto del Reino Unido y ha optado mayoritariamente por dar apoyo a los laboristas con el objetivo de echar a los tories de Downing Street. Es por eso por lo que los independentistas del SNP han logrado su peor resultado electoral desde el 2010. El Partido Nacional Escocés contaba hasta ahora con 48 de los 57 escaños escoceses, pero los resultados apuntan que se podría quedar solo con ocho.
El líder del partido y primer ministro escocés John Swinney ha admitido que la formación ha sufrido una derrota “muy y muy difícil y perjudicial” con unas cifras “muy bajas”. “Tenemos que escuchar atentamente a lo que nos dice la gente en estas elecciones”, ha admitido Swinney.
Hace solo un par de meses dimitió el primer ministro escocés y líder del SNP Humza Yousaf a raíz de la ruptura de los independentistas con los Verdes. Lo relevó el hasta entonces ministro de Economía, Swinney que, aparte de gobernar en minoría, tiene que liderar un partido en dificultades desde la dimisión en febrero del 2023 de la exprimera ministra Nicola Sturgeon, vinculada a un caso de financiación irregular del SNP.
What was expected to be a difficult night for the SNP now looks set to be cataclysmic!
— Mhairi Black 🏳️🌈 (@MhairiBlack) July 5, 2024
Blaming voters, or doing anything other than serious self reflection is precisely the kind of attitude that has turned so many away from the SNP
“No ha sido una buena noche”
Precisamente ha sido Sturgeon la que ha reconocido en la cadena de televisión británica ITV que “no ha sido una buena noche” para la formación política tras la publicación de los sondeos a pie de urna de las elecciones parlamentarias de este jueves. De esta manera, ha considerado que se trata de un momento “sísmico” para los laboristas, que habría logrado una victoria aplastante, puesto que se proyecta que habría obtenido 410 escaños. Mientras, el Partido Conservador de Rishi Sunak, perdería más de 240, quedándose con 131 escaños.
Con todo, Sturgeon ha subrayado que estos comicios tenían el objetivo de “sacar a los tories” del poder después de 14 años gobernando Reino Unido, y “sustituirlos por los laboristas”. En caso de que estos resultados se confirmen, el SNP habría pagado el precio del crecimiento de los laboristas en estos comicios. Pero, además, el partido ha estado en crisis después de que las autoridades hayan investigado sus finanzas y gestión, lo que ha sido objeto de crecientes críticas.