El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este sábado propuestas controvertidas para abordar la crisis en Gaza, marcando un giro significativo en la política estadounidense hacia el conflicto palestino-israelí. En una llamada con el rey Abdullah II de Jordania, Trump planteó la posibilidad de reubicar a más de un millón de palestinos de Gaza a países vecinos, como Jordania y Egipto, lo que ha generado reacciones mixtas en la región.
Plan de reubicación: «simplemente limpiamos todo eso»
Trump señaló que la situación en Gaza es un «desastre», con más del 90% de la población desplazada y gran parte de la infraestructura destruida por los ataques aéreos israelíes. Para Trump «Estamos hablando de un millón y medio de personas, y simplemente limpiamos todo eso», sugería el mandatario estadounidense. La propuesta incluye la construcción de viviendas en Jordania y Egipto para los desplazados, que “podrían ser temporales” o “podrían ser a largo plazo”.
El presidente subrayó que hablará con el presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sisi, para involucrarlo en este plan. Sin embargo, tanto Abdullah II como Sisi han calificado esta idea como «una línea roja», enfatizando que el traslado masivo de palestinos desestabilizaría aún más la región. Jordania ya alberga a más de 2,39 millones de refugiados palestinos registrados.
La propuesta de Trump rompe con la tradicional política de dos Estados defendida por administraciones anteriores. Desde hace tiempo, existen temores en la región sobre un posible intento de Israel de expulsar a los palestinos hacia países vecinos, una premisa rechazada oficialmente por el gobierno israelí pero respaldada por sectores de ultraderecha de su coalición gobernante.
El presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sisi, ya criticó en 2023 las evacuaciones masivas en Gaza, advirtiendo que estas medidas impedirían cualquier discusión futura sobre un Estado palestino viable.
Autoriza el envío de bombas suspendido por Biden
Trump también ha reforzado la alianza histórica con Israel al levantar sanciones impuestas por la administración Biden. Estas restricciones, que bloqueaban el suministro de bombas de una tonelada a Israel, fueron eliminadas por Trump, permitiendo la entrega inmediata de estos explosivos. El mandatario afirmó: «Pagaron por ellas y las han estado esperando durante mucho tiempo».
Además, Trump reafirmó su apoyo al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en su objetivo de exterminar a Hamás y destacó la «ubicación estratégica y el clima fenomenal» de Gaza para su reconstrucción futura.
El presidente también busca una alianza diplomática histórica entre Israel y Arabia Saudita, aunque el ataque de Hamás en 2023 complicó estas negociaciones. Arabia Saudita exige el fin de la guerra en Gaza y el reconocimiento de un Estado palestino como condiciones para formalizar este acuerdo.
Trump designó a Steve Witkoff como enviado especial a Oriente Medio. Witkoff ha logrado avances significativos, incluyendo un cese al fuego de seis semanas entre Israel y Hamas, y se espera que lidere las negociaciones con Irán para frenar su programa nuclear.