Cadáver de Nambala Keshava Rao/Telegram
Una operación militar en la zona selvática de Abhujmad, Chhattisgarh, culminó con la muerte de al menos 27 insurgentes maoístas, en un episodio que las autoridades califican como “un éxito sin precedentes”. Según fuentes próximas a la investigación, entre los fallecidos estaría Nambala Keshava Rao, conocido como Basavaraju, dirigente supremo del Partido Comunista de la India (Maoísta), aunque su fallecimiento aún no ha sido oficialmente confirmado.
El operativo fue llevado a cabo por unidades combinadas de la Guardia de Reserva del Distrito (DRG), desplegadas en los distritos de Narayanpur, Dantewada, Bijapur y Kondagaon. Se trató de una acción planificada tras recibir inteligencia sobre la presencia de altos mandos maoístas, incluyendo miembros del Politburó y líderes del Ejército Guerrillero de Liberación del Pueblo (EGLP).
El combate tuvo lugar en una espesa área boscosa, situada en el triángulo que conecta Narayanpur, Bijapur y Dantewada. El operativo, que se extendió por más de dos días, involucró a personal táctico de múltiples regiones y continúa activo con tareas de búsqueda, según confirmaron las autoridades policiales.
“Hasta ahora, hemos recuperado 27 cuerpos y un importante arsenal de armas”, declaró un oficial de alto rango. Lamentablemente, un agente de la DRG perdió la vida, mientras que varios resultaron heridos. Todos los heridos están fuera de peligro y han recibido atención médica inmediata, agregó el portavoz.
Aunque los informes iniciales indican que entre los muertos se encontrarían varios cuadros de alto rango, las autoridades aún no han difundido una lista oficial de identidades. Por su parte, el viceministro principal de Chhattisgarh, Vijay Sharma, sostuvo que entre los abatidos hay figuras clave del grupo maoísta.
En lo que va del año, la cifra de naxalitas muertos en el estado asciende a 200, de los cuales 183 han sido abatidos en la región de Bastar, una de las más conflictivas del país. Este enfrentamiento marca, según el gobierno central, un punto de inflexión en la lucha contra la insurgencia maoísta.
El primer ministro Narendra Modi no tardó en pronunciarse en redes sociales, expresando su satisfacción por lo ocurrido: “Nos sentimos orgullosos de nuestras fuerzas por este logro extraordinario. Nuestro compromiso es erradicar el maoísmo y brindar paz y desarrollo a nuestro pueblo”, escribió en su cuenta de X.
También el ministro del Interior, Amit Shah, celebró el operativo, calificándolo como un hecho histórico: “Es la primera vez en treinta años que un líder con rango de secretario general ha sido neutralizado”. Según añadió, el operativo en Narayanpur fue clave para la eliminación de Basavaraju, a quien definió como la “columna vertebral del movimiento naxal”.
Shah también reveló que tras el cierre de la llamada Operación Selva Negra, 54 insurgentes han sido detenidos y otros 84 se han rendido en los estados de Chhattisgarh, Telangana y Maharashtra. En un tono concluyente, el ministro remarcó que el gobierno central tiene como objetivo erradicar por completo el movimiento naxalita antes del 31 de marzo de 2026.
Este episodio, aunque presentado como una victoria militar, deja en el aire las raíces estructurales del conflicto, en una región marcada por la pobreza, el abandono institucional y la violencia cíclica entre el Estado y la insurgencia.