Una empresa con sede en Moscú, especializada en campañas de desinformación masiva al servicio del Kremlin y sancionada por Estados Unidos este año, tiene como objetivo desestabilizar las instituciones en España. Entre sus acciones se incluyen ataques a la jefatura del Estado y el respaldo a partidos situados a la derecha del Partido Popular. Así lo revelan documentos internos de la empresa, llamada Agencia de Diseño Social.
Ataques al Rey Felipe VI y a otros líderes europeos
Entre los archivos filtrados, se encuentra una lista de líderes europeos a los que se dirigen las campañas de esta agencia rusa, destacando el nombre de Felipe VI. Los documentos también señalan que el Kremlin contrata a esta empresa para difundir mensajes que perjudiquen las instituciones de cuatro países clave de la Unión Europea: Alemania, Francia, Italia y España. Estos documentos, que incluyen correos internos, guiones y presupuestos, revelan una estrategia diseñada para aumentar la desinformación en los dos últimos países, considerados por los rusos como «poco explorados».
Uno de los documentos filtrados revela que, antes de las elecciones europeas de junio, se identificó a España como un objetivo estratégico para las campañas de desinformación. El plan incluye el apoyo a políticos y partidos de derecha radical que rechacen las instituciones tradicionales, con la intención de forzar al Partido Popular a negociar con ellos y, eventualmente, reanudar la cooperación con Rusia. Esta estrategia, impulsada por el Kremlin, tiene como objetivo reducir el apoyo europeo a Ucrania.
Producción masiva de desinformación y contenido manipulado
Entre enero y abril de este año, la Agencia de Diseño Social produjo casi 40.000 piezas de contenido, incluidas más de 30.000 publicaciones en redes sociales y 4.600 videos. Este material ha sido compartido en internet con el propósito de fomentar narrativas antiamericanas, antieuropeas y, en algunos casos, antisemitas. Entre los memes y videos difundidos, destacan mensajes que critican a Estados Unidos y fomentan el sentimiento antiamericano entre los ciudadanos europeos.
Además de su enfoque en España, los documentos revelan que la agencia rusa también busca influir en países como Alemania, Francia, Italia y Polonia. La estrategia se centra en atacar a los «globalistas liberales» y a los líderes de la mayoría parlamentaria europea, como la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen. Estos mensajes buscan presentar a los líderes europeos como militaristas y enemigos de la paz.
El objetivo: Vox y otros partidos de derecha radical en Europa
La campaña rusa también menciona específicamente al partido español Vox, y los documentos indican que la agencia considera beneficioso difundir lemas asociados a ese partido, como «Que España vuelva a ser grande de nuevo» y «Vida, familia y religión». Aunque no hay pruebas de que Vox estuviera al tanto de esta estrategia, la dirección del partido ha negado cualquier contacto con el régimen ruso. Otros partidos de extrema derecha en Europa, como Alternativa por Alemania y el Frente Nacional en Francia, también figuran en los planes de esta agencia.