Irán presentó una protesta ante Moscú por lo que calificó como el arresto «violento» de dos estudiantes iraníes en la ciudad rusa de Kazán, informaron el sábado los medios estatales.
Acusaciones de torturas
Los estudiantes fueron detenidos el viernes en la Universidad Federal de Kazán después de visitar un centro de extensión de visas, donde la policía presuntamente los sometió a «palizas inhumanas y poco profesionales», según la agencia de noticias IRNA, citando un comunicado del consulado iraní en Kazán.
El gobierno de Irán presentó una «nota de protesta» al Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, condenando el incidente y exigiendo «explicaciones». Los estudiantes fueron liberados más tarde tras la intervención del consulado iraní. La policía de Kazán dijo en un comunicado el viernes que los agentes habían intervenido en un altercado físico entre estudiantes, deteniendo a los que identificaron como los «instigadores». La policía no reveló las nacionalidades de los involucrados.
Por otra parte, investigadores regionales en la república de Tartaristán, donde se encuentra Kazán, dijeron que dos ciudadanos extranjeros fueron arrestados por presuntamente «usar violencia contra un representante de la autoridad». Kazem Jalali, embajador de Irán en Moscú, condenó «cualquier tipo de mal comportamiento con los estudiantes iraníes» en una publicación en X, pidiendo responsabilidades a las autoridades rusas. El jefe de la diplomacia iraní, Abbas Araghchi, ha planteado «repetidamente» el tema, dijo Jalali.
Turquía se acerca a Rusia
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo el domingo durante una llamada telefónica con su homólogo ruso, Vladimir Putin, que quiere expandir el comercio entre Ankara y Moscú. «El presidente Erdogan declaró que su objetivo era aumentar la cooperación entre Turquía y Rusia en una serie de áreas, en particular ampliando el volumen del comercio», dijo la presidencia turca en un comunicado.
Aunque condenó rápidamente la invasión rusa de Ucrania, Turquía declaró una postura neutral en la guerra y no coincidió con las sanciones occidentales impuestas a Moscú. Erdogan ha justificado la política debido a la dependencia de Turquía del petróleo y el gas rusos.
Cinco empresas turcas fueron objeto de sanciones estadounidenses en septiembre de 2023 por suministrar productos y servicios a empresas de defensa rusas. En una carta enviada en agosto de 2022, el subsecretario del Tesoro de Estados Unidos advirtió a las empresas turcas de un «mayor riesgo» para ellas ante «los intentos de Rusia de utilizar» a Turquía «para evadir las sanciones».