Las misiones espaciales ya no son solo una cuestión gubernamental llevada a cabo por organismos públicos. Tampoco son solo atracciones cargadas de adrenalina para turistas millonarios, que pagan costosísimos billetes para ser llevados en un vuelo suborbital de apenas unos minutos. Ahora, también hay viajeros espaciales que realizan actividades que les permiten llamarse astronautas, según la nueva definición de la palabra.
En este sentido, la misión Polaris Dawn está haciendo historia: ha batido este miércoles el récord absoluto de altura orbital y, este jueves, dos astronautas que no pertenecen a ninguna agencia espacial como la NASA o la ESA han realizado los primeros paseos espaciales privados.
El magnate tecnológico Jared Isaacman y la ingeniera aeroespacial Sarah Gillis han completado así la maniobra más arriesgada de la Polaris Dawn, que comenzó hoy a las 11:58, hora peninsular española. En ese momento, arrancaron las últimas comprobaciones antes de abrir la escotilla de la Resilience, una nave Crew Dragon que Space X ha adaptado para este innovador vuelo espacial de cinco días.
A las 12:13 el control de misión dio desde la Tierra su visto bueno definitivo y la orden de empezar la operación, que comenzó de manera efectiva tras algo más de 35 minutos, cuando los trajes espaciales estuvieron llenos de aire y, a continuación, el compartimento se hubo despresurizado hasta casi alcanzar el vacío. En ese momento, la nave se encontraba en el apogeo de su órbita, que se había reducido a un alejamiento máximo de unos 740 kilómetros tras haber marcado ayer un récord histórico al superar los 1.400 kilómetros de distancia.
“Desde aquí parece un mundo perfecto”
Pasadas las 12:50, Jared Isaacman asomó parte de su cuerpo fuera de la nave y comenzó a hacer pruebas de movilidad del traje espacial: “SpaceX, cuando volvamos a casa tenemos mucho trabajo que hacer, pero desde aquí parece un mundo perfecto”, declaró entonces Isaacman mientras contemplaba la Tierra.
Después fue el turno de Sarah Gillis. La primera astronauta de SpaceX realizó exactamente las mismas comprobaciones de movilidad del traje espacial antes de entrar de nuevo en la nave y cerrar la escotilla.
Está previsto que ambos hagan turnos de aproximadamente 15 minutos durante dos horas, mientras los otros dos tripulantes, Anna Menon, ingeniera principal de operaciones y oficial médica de vuelo, y el piloto Scott Poteet, les asisten desde la nave. Mientras caminan en el espacio, Gillis e Isaacman están en contacto permanente con la nave a través de los pasamanos y rieles añadidos a la cápsula para este fin.
Quienes son los astronautas
Esta es la segunda misión espacial de Jared Isaacman (41 años), un magnate tecnológico que además es piloto aéreo y astronauta comercial. Como sucede ahora con la Polaris Dawn, también Isaacman financió y fue el comandante en 2021 de Inspiration4, la primera misión orbital de SpaceX con una tripulación formada solo por civiles.
Sarah Gillis (30 años) es una ingeniera aeroespacial de la compañía de Elon Musk, en la que es responsable del programa de entrenamiento de astronautas y tiene además amplia experiencia desde tierra en el control de misiones espaciales. Es su primer vuelo espacial y ya había hecho historia también este miércoles cuando, junto con su compañera de misión Anna Menon, se convirtió en la mujer que ha volado más lejos de la Tierra. Además, antes que ellas ningún empleado de SpaceX había volado al espacio.