El secretario general de la ONU António Guterres argumentaba la necesidad de crear un órgano consultivo sobre la Inteligencia Artificial (IA) el pasado año. Decía que “el potencial de transformación positiva que ofrece resulta todavía difícil de asimilar” y señalaba que su uso “malintencionado” puede “socavar la confianza en las instituciones, debilitar la cohesión social y amenazar la democracia”.
El High Level Advisory Body on Artificial Intelligence (HLAB-AI), el órgano asesor de alto nivel en inteligencia artificial, ha publicado este jueves las siete medidas fundamentales para asegurar un desarrollo de la IA inclusivo. El informe final se titula Gobernar la IA para la humanidad y han participado más de 2.000 personas.
El órgano asesor lamenta la ausencia de “un marco global que rija la IA” y la falta de compromiso de los Estados miembros; solo siete son parte de todas las iniciativas (Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos) y “118 están desaparecidos por completo, principalmente en el Sur Global”, según detalla el texto final.
“Con su desarrollo en manos de unas pocas empresas multinacionales en unos pocos países, los impactos de la implementación de la IA corren el riesgo de imponerse a la mayoría de las personas sin que tengan voz en las decisiones para hacerlo”, advierte el HLAB-AI en su informe.
Estas son las siete medidas que propone el informe
La primera es un panel científico internacional cuya misión será ayudar a los Estados miembros a desarrollar una visión compartida de la nueva herramienta y abordar las asimetrías de información entre los laboratorios y el resto del mundo.
Otra medida es el diálogo político, es decir, reuniones intergubernamentales y de múltiples partes interesadas. La tercera es la conexión de representantes de organizaciones regulatorias, empresas tecnológicas y la sociedad civil para garantizar la interoperabilidad técnica de los sistemas de IA a través de las fronteras.
El documento también habla de una red mundial que impulsará mediante formación, recursos y datos el acceso a los desarrollos de investigadores y emprendedores sociales.
El fondo mundial será el encargado de abordar las deficiencias en materia de capacidad y colaboración. Por su parte, el marco mundial de datos pretende normalizar las definiciones, los principios y la administración de los datos, garantizando la transparencia y la rendición de cuentas en los sistemas de IA.
Por último, el informe propone la creación de una pequeña oficina de IA, dentro de la Secretaría de las Naciones Unidas, para apoyar y coordinar la implementación de estas propuestas.