Imagen: Trayectoria de 2024 PT5 alrededor de la Tierra entre 25 años antes y 25 después de la época actual. Carlos y Raúl de la Fuente Marcos
La presencia de la nueva invitada del cielo pasará desapercibida para la mayoría, pero lo cierto es que será un fenómeno extraordinario. A partir del próximo 29 de septiembre, la Tierra contará con una segunda «luna», una miniluna que, durante dos meses, orbitará nuestro planeta antes de seguir su camino hacia el espacio. Se trata, nada más y nada menos, que del asteroide 2024 PT5, una roca que, aunque pequeña en tamaño, trae consigo un evento que no se repetirá hasta el año 2055.
El estudio Una miniluna de dos meses: 2024 PT5 Capturado por la Tierra de septiembre a noviembre, publicado en Research Notes, indica que el asteroide 2024 PT5 se convertirá en una miniluna de la Tierra del 29 de septiembre al 25 de noviembre de 2024. Este objeto, descubierto el 7 de agosto de 2024 por el Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides en Sutherland (Sudáfrica), sigue una trayectoria de herradura similar a la de otros objetos cercanos a la Tierra (NEOs) que han sido capturados temporalmente por la gravedad terrestre.
El 2024 PT5, con un tamaño aproximado de 10 metros, es más grande que otros NEOs conocidos como el 2020 CD3 y el 2006 RH120. Su órbita heliocéntrica ha sido determinada a partir de 122 observaciones realizadas en un período de 21 días, mostrando elementos orbitales consistentes con los de la población de asteroides Arjunas. A
unque se trata de un visitante ocasional, su recorrido lo llevará a ser «capturado» temporalmente por la gravedad terrestre, convirtiéndose así en nuestra miniluna que estará presente durante 56 días. Después, el asteroide seguirá su camino y no volverá a acercarse a nuestro planeta hasta dentro de más de tres décadas, en el año 2055.
Esta pequeña roca especial no es lo suficientemente grande como para causar estragos ni tampoco será visible a simple vista. De hecho, ni siquiera los telescopios convencionales podrán detectarla. Para observar este satélite temporal, los astrónomos necesitarán equipos avanzados que permitan registrar su breve estancia junto a nosotros.
No es la primera vez que ocurre
Aunque la noticia de una nueva miniluna puede sonar novedosa, lo cierto es que no es la primera vez que La Tierra disfruta de la compañía de un «satélite extra». A lo largo de los últimos años, nuestro planeta ha recibido la visita de varias minilunas, como los asteroides 2006 RH120 y 2020 CD3, ambos de tamaño reducido y que también orbitaban nuestro planeta durante periodos limitados antes de volver al espacio. Incluso los asteroides 1991 VG y 2022 NX1 realizaron trayectorias parciales alrededor de la Tierra antes de desviarse nuevamente.
Este fenómeno es posible gracias, precisamente, a la interacción entre la masa del asteroide, la gravedad terrestre y la velocidad a la que estos cuerpos viajan por el espacio.