La ministra de Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, y su homólogo francés, Jean-Noël Barrot, han reconocido tras una visita a Siria la naturaleza yihadista de las nuevas autoridades sirias encabezadas por Hayat Tahrir al Sham (HTS), pero han destacado la importancia de juzgar a la organización por sus próximos pasos. A pesar del escepticismo, ambos diplomáticos subrayaron la necesidad de garantizar la seguridad de la población siria en esta nueva etapa política.
Encuentro con el líder de HTS
Durante el encuentro con el líder de HTS, Ahmed al Shara, alias ‘Abú Mohamed al Golani’, Baerbock manifestó que la Unión Europea seguirá evaluando la situación en función de los actos futuros del grupo. Además, pidió la integración de las milicias kurdas-árabes, encabezadas por las Fuerzas Democráticas Sirias , en el nuevo aparato de seguridad que está siendo conformado por las autoridades yihadistas a cambio de garantías de protección para la minoría kurda en la región de Rojava, en el noreste del país.
La ministra alemana también hizo un llamado al cese de los enfrentamientos entre las FDS y las milicias respaldadas por Turquía en el norte de Siria. Durante su estancia en Siria, Baerbock y Barrot visitaron la cárcel de Sednaya, un lugar emblemático de la represión bajo el gobierno del expresidente Bashar al Assad, derrocado recientemente tras una ofensiva rebelde liderada por HTS.
En el lugar, Baerbock reconoció la imposibilidad de devolver la vida a las miles de víctimas que murieron en ese centro de detención, muchas de ellas prisioneros políticos, pero reafirmó el compromiso de la comunidad internacional en la búsqueda de justicia. Alemania y la Unión Europea han apoyado a lo largo de los últimos años a organizaciones como los Cascos Blancos y a la ONU en la recopilación de pruebas sobre los crímenes cometidos en Siria.
Baerbock aseguró que el objetivo de la presencia europea es contribuir a la investigación de los crímenes y apoyar el proceso de justicia para las víctimas. Al llegar a Damasco, Baerbock declaró que un nuevo comienzo político es posible entre Europa y Siria, siempre y cuando se garanticen los derechos de todos los sirios, independientemente de su origen étnico o religioso.
Destacó la importancia de proteger los derechos de las mujeres y las minorías y advirtió sobre el peligro de posibles retrasos excesivos en el proceso de transición política, así como de medidas que puedan islamizar los sistemas de justicia y educación. Estas declaraciones surgen tras el anuncio de ‘Al Golani’ de que el proceso de transición en Siria podría extenderse hasta cuatro años debido a la necesidad de redactar una nueva Constitución y llevar a cabo un censo actualizado.
Compromiso de Francia y Alemania
En un comunicado posterior, el Ministerio de Exteriores de Francia describió al nuevo gobierno sirio como “autoridades de facto” y ofreció su colaboración para apoyar el trabajo constitucional resultante de la conferencia nacional convocada por el HTS. Francia también reiteró la importancia de continuar la lucha contra Estado Islámico y de evitar la proliferación de armas químicas.
Los ministros de ambos países hicieron un llamado a poner fin a los combates en el norte de Siria y a encontrar una solución que garantice los intereses de seguridad de todos los actores implicados, incluyendo sus aliados kurdos de las FDS. El gobierno francés aseguró haber recibido el compromiso de las nuevas autoridades sirias de continuar la lucha contra el terrorismo, permitir el pronto acceso de una misión de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas y colaborar en la protección de la frontera sirio-libanesa.
Asimismo, Francia y Alemania se comprometieron a aportar conocimientos técnicos en criminología para apoyar los esfuerzos de lucha contra la impunidad de los crímenes cometidos durante el régimen de Al Assad.