Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) atacaron el hospital árabe Al-Ahli en Gaza entre la noche del sábado y el domingo. Según informes de medios árabes, las FDI atacaron la unidad de emergencia y un área donde se almacenaba oxígeno medicinal para pacientes en cuidados intensivos. Antes de la ofensiva, las FDI habían solicitado la evacuación del hospital, y no se reportaron víctimas.
El portavoz de las FDI indicó que el hospital había sido utilizado por Hamás para llevar a cabo operaciones terroristas contra las fuerzas israelíes y civiles de Israel. Además, detalló que se tomaron medidas para minimizar el riesgo a civiles y al hospital, tales como advertencias previas, el uso de municiones de precisión y observación aérea.
Aseguró que Hamás infringe sistemáticamente el derecho internacional y usa instalaciones civiles como escudos humanos para perpetrar ataques. Los palestinos señalaron que el hospital atacado es el más grande que aún opera en el norte de Gaza. Tras recibir la advertencia de las FDI, el personal evacuó a los pacientes y sus camas hacia la calle.
El hospital denunció que el ataque israelí ocurrió poco después de la advertencia. Los residentes de Gaza expresaron su desesperación, diciendo que ya no quedaban lugares seguros. Según las FDI, existe la posibilidad de que el hospital sea atacado nuevamente.
En otra acción, Al Jazeera reportó la muerte de siete palestinos en un ataque israelí contra un vehículo cerca de Deir al-Balah, en el centro de Gaza. Además, las FDI anunciaron que habían tomado el control de la ruta de Morag, que conecta Rafah y Khan Yunis. El ministro de Defensa, Yisrael Katz, afirmó que esta área sería parte de la zona de seguridad israelí.
Katz advirtió que las operaciones de las FDI se expandirán a otras partes de Gaza y que los civiles deberán evacuar las zonas de combate. Acusó a Hamás de no ser capaz de proteger a los residentes de Gaza y destacó que sus líderes se esconden en túneles o en hoteles de lujo en el extranjero.