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En medio de la ofensiva israelí en El Líbano y las dificultades que enfrenta Hezbollah, varios grupos armados de la región, apoyados por Irán y vinculados a la milicia libanesa, han incrementado sus ataques contra Israel. El objetivo parece ser desviar la atención y recursos israelíes hacia otros frentes. Aunque estos ataques también han alcanzado en menor medida a posiciones estadounidenses, su escalada coincide con la intensificación de la ofensiva israelí en Gaza, y refleja la creciente coordinación entre estos grupos en los últimos meses.
Reforzamiento del Eje de la Resistencia
Los principales grupos que conforman el Eje de la Resistencia, liderado por Irán y compuesto por Hezbollah, el movimiento hutí de Yemen y varias facciones iraquíes, ya tenían un centro de operaciones conjunto para coordinar sus acciones regionales, principalmente contra Israel y Estados Unidos. Sin embargo, tras el inicio del conflicto en Gaza, han fortalecido aún más sus lazos y cooperación mediante reuniones de alto nivel en Teherán y Bagdad.
Uno de los principales focos de estas alianzas ha sido el fortalecimiento de las capacidades de misiles y drones de los combatientes iraquíes, con el fin de atacar a Israel. En este contexto, en julio, un comandante hutí experto en drones murió en un ataque estadounidense en Irak, y un mes antes, las milicias iraquíes reivindicaron su primer ataque conjunto con drones contra Israel.
Ataques desde Irak y Yemen
Los grupos de la Resistencia Islámica en Irak han intensificado recientemente sus ataques, reivindicando acciones contra Israel, aunque algunas no han sido confirmadas. Este lunes afirmaron haber lanzado misiles y drones contra cuatro objetivos en Israel, incluyendo dos en Haifa.
Además, las milicias iraquíes han amenazado con reanudar sus ataques contra posiciones estadounidenses en Irak. Entre octubre de 2023 y enero, se registraron más de 170 ataques a fuerzas estadounidenses en Irak y Siria, acciones que se habían pausado tras un ataque en Jordania. Desde julio, los ataques han retomado fuerza, y los combatientes iraquíes han expresado su disposición a apoyar al grupo terrorista en el conflicto con Israel.
Por su parte, los hutíes han reivindicado tres ataques recientes contra Israel, incluyendo uno dirigido a Tel Aviv y al aeropuerto Ben-Gurión, así como otro contra buques de guerra estadounidenses en el mar Rojo. Aunque estos ataques fueron interceptados, Israel respondió bombardeando Yemen, causando al menos cuatro muertos.
Impacto en las regiones de Siria
Paralelamente, algunos grupos iraquíes también parecen estar detrás de ataques recientes a posiciones estadounidenses en Siria, mientras Israel ha intensificado sus bombardeos en territorio sirio. En septiembre, el ejército israelí admitió haber matado a un destacado miembro de una milicia iraquí en un ataque cerca de Damasco, y también ha bombardeado zonas fronterizas entre Siria y Líbano. Además, se han mantenido su campaña de ataques a buques mercantes y de guerra en el mar Rojo, en un intento de presionar a Israel para que ponga fin a la guerra en Gaza. Estos ataques han causado una disminución del tráfico marítimo en la zona de casi el 70% respecto al año anterior, según datos del FMI y la Universidad de Oxford.