Según cuatro fuentes rusas citadas por Reuters, Vladímir Putin podría detener la guerra en Ucrania mediante un alto el fuego negociado que reconozca las líneas del frente actuales, lo que implicaría que Rusia retendría el territorio ucraniano que ha ocupado desde el inicio de la invasión en febrero de 2022.
Estas fuentes, cercanas al círculo íntimo de Putin, sugieren que el presidente ruso está abierto tanto a detener el conflicto como a continuar la guerra, dependiendo de la respuesta de Kyiv y Occidente. Además, expresan la frustración de Putin por lo que percibe como intentos occidentales de obstaculizar las negociaciones y la decisión de Zelenski de rechazarlas.
Una de las fuentes, con experiencia en el Kremlin, afirma que Putin está dispuesto a luchar o detener la guerra según sea necesario. Reuters también ha hablado con otras fuentes anónimas que han trabajado con Putin, todas las cuales confirman su postura en relación con el territorio ucraniano.
Putin afirma estar dispuesto a luchar o detener la guerra
Aunque Putin insiste en mantener el territorio ganado en batalla como una condición innegociable, algunas fuentes sugieren que podría aceptar detener la guerra en las líneas del frente actuales, lo que implicaría que Rusia conservaría parte de Ucrania, incluyendo regiones como Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón.
Sin embargo, este posible acuerdo no cumpliría con los objetivos originales de Rusia, que pretendía controlar completamente estas regiones. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha rechazado la devolución de estas regiones a Ucrania, argumentando que ahora son parte permanente de Rusia según su Constitución. Peskov no ha confirmado directamente la disposición de Putin para detener la guerra, pero ha señalado que Rusia está abierta al diálogo para lograr sus objetivos y evitar una guerra prolongada. Mientras tanto, las autoridades ucranianas, lideradas por Zelenski, continúan rechazando cualquier acuerdo que no incluya la recuperación de los territorios ocupados, incluyendo Crimea.