Grupos rebeldes sirios han lanzado una ofensiva limitada hacia Alepo para detener los ataques del gobierno sirio contra la población civil en la provincia de Idlib, según confirmaron fuentes de seguridad turcas este jueves.
La operación, encabezada por Hay’at Tahrir al-Sham (HTS) y otras fuerzas alineadas, ha resultado en avances significativos, con informes de que los combatientes han capturado extensas áreas de territorio y se encuentran cerca de las afueras de Alepo.
La ofensiva busca restaurar los límites de la zona de distensión en Idlib, establecidos en un acuerdo de 2019 entre Turquía, Rusia e Irán, que han sido reducidos debido a los avances de las fuerzas leales al presidente Bashar al-Assad, respaldadas por Rusia y milicias aliadas, incluido Hizbulá. Desde 2020, estas fuerzas han tomado territorios cerca de Alepo en violación del acuerdo, lo que ha generado tensiones persistentes en la región.
Turquía, que mantiene puestos de observación en Idlib y respalda a ciertas facciones rebeldes, intentó prevenir la ofensiva a través de los canales diplomáticos establecidos por el acuerdo, pero no logró detener los recientes ataques aéreos del gobierno sirio y ruso contra zonas residenciales.
Desde 2020 Hizbulá ha tomado territorios cerca de Alepo
Según fuentes turcas, más de 30 civiles han muerto en estos ataques, incluidos tres niños en el bombardeo de una escuela coránica, y más de 100 personas han resultado heridas. Inicialmente planeada como una operación limitada, la ofensiva se expandió rápidamente ante la retirada de las fuerzas del régimen de sus posiciones. Grupos afiliados al Ejército Nacional Sirio, respaldados por Turquía, también han comenzado a unirse a la operación, aunque la mayoría de estas facciones permanecen al margen por ahora.
El objetivo de los rebeldes es retomar el control sobre las partes orientales de Idlib hasta los límites acordados en 2019, lo que implicaría un retroceso significativo para las fuerzas del gobierno.
El general de brigada del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica Kyomars Porhashmi, alto asesor iraní en Siria, murió en un ataque de grupos armados de la oposición en Alepo
Turquía, que no ejerce control directo en Idlib, ha intentado previamente normalizar las relaciones con el gobierno de Assad, pero los esfuerzos fracasaron debido a la exigencia de Damasco de una retirada total de las tropas turcas del norte de Siria.
Ankara ha reiterado su preocupación por una posible escalada que podría complicar aún más la situación, especialmente en un contexto regional marcado por las guerras de Israel en Gaza y el Líbano. La situación en Siria sigue siendo volátil, con el riesgo de una escalada mayor en una región ya devastada por años de conflicto.
