Una oficina en Arizona utilizada por la campaña de Kamala Harris fue tiroteada la madrugada del lunes en el segundo ataque armado aparente en una semana, según los investigadores. La policía de Tempe, Arizona, acudió a la oficina, que también utiliza el Partido Demócrata local, después de recibir llamadas de miembros del personal sobre los daños. Se encontraron al menos cinco agujeros de bala en las ventanas y la puerta.
«Nadie estaba dentro de la oficina durante las horas de la noche, pero esto genera preocupaciones sobre la seguridad de quienes trabajan en ese edificio, así como de los que están cerca», dijo el portavoz de la policía de Tempe, el sargento Ryan Cook, a ABC News.
No se ha determinado el móvil de tiroteo
La policía de Tempe dijo que estaba analizando la evidencia y que estaba tomando «medidas adicionales» después del tiroteo «para garantizar la seguridad del personal y otras personas en el área». Aún no se ha determinado el motivo del tiroteo y la investigación continúa, según la policía.
La misma oficina fue baleada solo una semana antes, el 16 de septiembre, en un incidente que, según la policía, parecía involucrar una pistola de balines o perdigones. Ese tiroteo también ocurrió justo después de la medianoche y causó «daños criminales», según la policía.
La presidenta del Partido Demócrata de Arizona, Yolanda Bejarano, condenó el vandalismo en una declaración a KNXV, afiliada de ABC News Phoenix. «Es extremadamente triste que el Partido Demócrata de Arizona se haya convertido en el blanco de la violencia, no es lo que somos como arizonenses o estadounidenses. Estamos trabajando con las fuerzas del orden para garantizar que esta amenaza se tome en serio y que los miembros de nuestro personal estén seguros mientras trabajan«, dijo en un comunicado. Las fuerzas del orden de todo el país están en alerta máxima por un aumento de las amenazas de violencia política.
Los trabajadores llegaron a la oficina el lunes y reportaron lo que parecían ser disparos a través de las ventanas delanteras. Es la segunda vez que se reportan daños criminales en la oficina en igual número de semanas. Justo después de la medianoche del 16 de septiembre, las ventanas delanteras fueron disparadas con lo que parece ser una pistola de aire comprimido o una pistola de perdigones, según la policía.
No se han realizado arrestos en ninguno de los incidentes. Las autoridades están investigando todos los posibles motivos. El tiroteo se produce poco después del segundo atentado contra la vida de Trump en su campo de golf de West Palm Beach el 15 de septiembre.