El viernes 16 de agosto por la noche, el secretario nacional del partido Acción Democrática (AD), Piero Maroun, fue detenido en Caracas por agentes «no identificados», según denunciaron varios líderes opositores venezolanos.
María Corina Machado, líder opositora, confirmó a través de las redes sociales que Maroun fue arrestado la noche del viernes y exigió su liberación inmediata. El secretario general de AD, Henry Ramos Allup, explicó en X que tres personas no identificadas obligaron a Maroun a subirse a una camioneta mientras cenaba con su esposa y cuñada en un restaurante a las 10:20 pm.
El partido Primero Justicia también se pronunció, denunciando que el gobierno de Nicolás Maduro continúa violando los derechos humanos y persiguiendo a aquellos que exigen el respeto a la voluntad popular manifestada el 28 de julio. La Plataforma Unitaria Democrática (PUD), la principal coalición opositora, expresó que la persecución y el hostigamiento contra los dirigentes democráticos no cambiarán la voluntad del pueblo venezolano, que votó por Edmundo González en las elecciones presidenciales del 28 de julio.
La detención de Maroun ocurrió justo antes de que la oposición participara en una «protesta mundial» en defensa de lo que consideran «la verdad», insistiendo en que González Urrutia ganó las presidenciales según el «83,5 % de las actas», a pesar de que el gobierno rechaza estos resultados. Varios opositores y partidos exigieron la liberación de Maroun, destacando la gravedad de la situación.
Este viernes, 22 países y la Unión Europea solicitaron la «inmediata publicación de todas las actas originales» y urgieron a las autoridades venezolanas a poner fin a la violencia y liberar a todos los detenidos, incluidos los representantes de la oposición. El Consejo Permanente de la OEA también aprobó por consenso una resolución que exige la rápida publicación de las actas electorales. Además, subrayaron que es una «prioridad absoluta y una obligación para Venezuela» respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales.