Durante un mitin en Wilkes-Barre, Pensilvania, el expresidente Donald Trump hizo varios comentarios que destacaron su estilo característico, combinando bromas, ataques políticos y mensajes dirigidos a la comunidad hispana.
Uno de los momentos clave fue cuando Trump invitó a Daniel Campos, un piloto venezolano que ahora vive en Pensilvania, a subir al escenario. Campos compartió su historia sobre cómo escapó del socialismo en Venezuela y recordó cómo sus abuelos huyeron del comunismo en Cuba. Durante su intervención, Campos advirtió que Estados Unidos podría seguir el mismo camino que Venezuela si no se toman medidas, enfatizando que la reelección de Trump es, según él, la única forma de evitar ese destino. En su discurso, Campos también se dirigió en español a los votantes hispanos y latinos presentes, destacando el interés de la campaña de Trump en captar el apoyo de este grupo demográfico.
Este testimonio se alinea con la narrativa de la campaña de Trump, que ha comparado en repetidas ocasiones las políticas de la administración Biden-Harris con las de regímenes socialistas y comunistas. Trump incluso ha etiquetado las propuestas económicas de Kamala Harris como el «plan Maduro», en referencia al presidente venezolano Nicolás Maduro. Este enfoque busca generar preocupación entre los votantes, especialmente aquellos con antecedentes familiares en países que han sufrido bajo regímenes autoritarios.
Además, durante el mitin, Trump se desvió hacia un comentario humorístico al afirmar que es «mucho más guapo» que Kamala Harris. Según Trump, escuchó a un comentarista decir que Harris tenía una ventaja sobre él porque es una «mujer muy guapa». En tono irónico, Trump respondió: «Yo soy más guapo que Kamala». Luego repitió la broma, expresando su incredulidad ante la afirmación: «Dijeron que su mayor ventaja es que es una mujer hermosa. Y yo, eh, nunca pensé en eso. Soy más guapo que ella». Este tipo de comentarios son característicos de Trump, que frecuentemente mezcla críticas y ataques personales con humor para conectar con su audiencia.
El mitin de Wilkes-Barre combinó mensajes serios sobre la dirección del país y la lucha contra el socialismo, con el estilo provocador y desenfadado que ha definido a Trump en sus apariciones públicas. Su énfasis en los peligros del comunismo y el socialismo, junto con los esfuerzos por acercarse a los votantes hispanos, reflejan su estrategia para las próximas elecciones