El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha designado a Massad Boulos, empresario de origen libanés y suegro de su hija Tiffany, como asesor principal para asuntos árabes y de Oriente Próximo. Este nombramiento llega apenas un día después de haber seleccionado a Charles Kushner, suegro de su hija Ivanka, como futuro embajador en Francia.
Boulos destaca por su papel clave en la campaña electoral de Trump. Lideró los esfuerzos para captar votantes de la comunidad árabe-estadounidense en Míchigan, tradicionalmente demócrata, mediante reuniones estratégicas en áreas descontentas con la política de Joe Biden hacia Israel. Este trabajo fue determinante para que Trump venciera a Kamala Harris en el distrito libanés de Dearborn Heights, inclinando la balanza en el estado bisagra.
Una figura polémica en un equipo proisraelí
Massad Boulos, descrito por Trump como un defensor de los valores republicanos y «negociador incansable por la paz en Oriente Próximo», contrasta con otros nombramientos clave en su futura administración. Entre ellos figuran Elise Stefanik, embajadora ante la ONU y férrea aliada de Israel, y Mike Huckabee, futuro embajador en Israel, conocido por rechazar la creación de un Estado palestino y su apoyo a la reconstrucción de un templo judío en la Explanada de las Mezquitas.
Con experiencia en el Líbano y relaciones políticas en la región, podría desempeñar un papel moderador dentro de un equipo con marcadas inclinaciones proisraelíes. Su conocimiento podría ser valioso para sostener el frágil alto el fuego entre Israel y Líbano, logrado bajo la administración de Biden pero aún condicionado a los intereses israelíes.
Oriente Próximo y la estrategia electoral
Durante la campaña se convirtió en un puente entre Trump y la comunidad árabe-estadounidense, capitalizando el malestar generado por el respaldo a la ofensiva israelí en Gaza, que ha dejado más de 44.000 muertos tras los ataques de Hamás en octubre de 2023. Este enfoque ayudó a Trump a recuperar Míchigan, estado que perdió en 2020 con un ajustado 49,7% de los votos frente a Harris.
La elección de Boulos es vista como un intento de equilibrar las tensiones internas dentro de la coalición republicana y ampliar su base de apoyo en comunidades clave. No obstante, su capacidad para influir en las políticas de Oriente Próximo frente a figuras de línea dura como Huckabee y Pete Hegseth, propuesto como secretario de Defensa, sigue siendo incierta.