Uno de los peores pedófilos de Gran Bretaña, que encabezó una secta vil que abusó de niños pequeños durante más de 10 años, podría ser liberado de prisión esta semana. Colin Batley recibió una sentencia indeterminada con un mínimo de 11 años en 2011 después de ser declarado culpable de 35 delitos, incluidas violaciones múltiples.
Batley tiene una audiencia de la Junta de Libertad Condicional el viernes 7 de marzo, donde un panel de expertos evaluará su caso y puede decidir liberarlo. Al dictar sentencia, el juez dejó en claro que Batley sería elegible para solicitar la libertad condicional solo una vez que se determinara que ya no representaba un peligro para el público.
Una parte importante de ese proceso es admitir su culpabilidad, algo que negó con vehemencia durante todo el juicio.
Es su tercera audiencia y los expertos temen que lo libere. El depredador les lavó el cerebro a los niños y dirigió el culto en un callejón sin salida en la pequeña ciudad de Kidwelly en Carmarthenshire, Gales.
Secta autodestructiva
El ex guardia de seguridad de Tesco se había mudado desde Londres. Tres mujeres, incluida su esposa, también fueron encarceladas por su papel en el culto. Había abusado sexualmente y violado a niños y jóvenes durante más de tres décadas, y le habían advertido que corría el riesgo de morir tras las rejas. Gary Beer, concejal de la ciudad de Kidwelly, dijo que el caso aún se cierne sobre la zona. Dijo: “Fue horrible. Lo sucedido todavía conmociona a la comunidad local.
“Muchas personas se vieron afectadas. “Batley debería permanecer tras las rejas por el resto de su vida. La vida debe significar vida. “Lo que hizo fue arruinar la vida de la gente local. Era repugnante. Me da asco. “Mi mensaje a la Junta de Libertad Condicional es que por favor, en nombre de la gente local, lo mantengan encerrado. No merece la libertad”.
Batley se mudó de Londres a Kidwelly en la década de 1990, donde el culto operaba desde una serie de casas en un tranquilo callejón sin salida, donde se decía que ya se habían producido abusos sexuales. Estableció lo que fue descrito en la corte como un “culto sexual de magia negra”, del cual él era el autoproclamado “sumo sacerdote”.
El jurado escuchó que Batley aterrorizó psicológicamente y coaccionó a niños vulnerables para que realizaran actos sexuales viles, mediante amenazas de muerte y lavado de cerebro. Llevó a cabo ceremonias e indicó la pertenencia al culto con un antiguo tatuaje de “ojo egipcio” de Horus, un dios con cabeza de halcón en sus brazos. Batley obligó a varias de las víctimas a prostituirse y reclamó el 25% de sus ganancias. Los demás miembros de su secta ya han sido liberados después de cumplir solo unos años de sus condenas.
En el Tribunal de la Corona de Swansea, en marzo de 2011, Jacqueline Marling, entonces de 42 años, descrita como la “mano derecha” de Batley, fue encarcelada durante 12 años, mientras que la esposa de Batley, Elaine, de 47 años, fue encarcelada durante ocho años.
Shelly Millar, de 35 años, descrita durante el juicio como la “esclava sexual” de Batley, fue encarcelada durante cinco años. Vincent Barden, de 70 años, de Kempston, Bedfordshire, que no era miembro de la secta, fue encarcelado durante tres años después de admitir dos cargos de agresión sexual contra una niña menor de edad.
Marling, ahora de 53 años, fue liberado en 2017 después de cumplir solo seis años. Elaine Batley, ahora de 58 años, fue liberada en 2014 después de cumplir menos de la mitad de su sentencia. Millar, ahora de 46 años, también fue liberado en 2014 después de tres años en la cárcel, mientras que Barden, ahora de 81 años, fue liberado en 2012, poco más de un año después de su sentencia de tres años. No se sabe si sigue con vida.
En una ocasión, Batley trató de obligar a una colegiala embarazada a dar a luz. A la niña, que había sido violada por un miembro de la secta, se le dijo que todos los niños concebidos dentro de la secta pertenecían a ella. Una víctima dijo después del veredicto: “Colin sabía cómo manipularte, para hacerte creer todo lo que decía”. Batley fue declarado culpable de delitos que incluyen 11 violaciones, tres agresiones indecentes, causar prostitución para beneficio personal, hacer que un niño tenga relaciones sexuales e incitar a un niño a tener relaciones sexuales.
