La reciente salida de Edmundo González, presidente electo de Venezuela, ha generado un intenso debate que ha puesto en entredicho la versión oficial del Gobierno de España, encabezado por Pedro Sánchez.
Mientras desde Moncloa y el Ministerio de Exteriores se insiste en que no hubo negociaciones ni acuerdos con el régimen venezolano, las imágenes que muestran a González firmando una carta de renuncia bajo coacciones en la residencia del embajador español sugieren lo contrario, complicando la posición del Ejecutivo español.
Diosdado Cabello, una de las figuras clave del régimen de Nicolás Maduro, ha sido el primero en contradecir la versión española. En su programa semanal de televisión, Cabello aseguró que sí existía un “pacto de caballeros” para facilitar la salida de González de Venezuela. Además, acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de mentir, señalando que “el control de daños para ellos es terrible”.
Cabello también criticó las declaraciones de González, quien afirmó haber firmado la carta bajo coacción. En dicho documento, el presidente electo de Venezuela reconocía la victoria de Nicolás Maduro en las elecciones, según lo dictado por el Tribunal Supremo de Justicia, una institución controlada por el chavismo.
El Gobierno de Maduro destapa las mentiras de Sánchez
La firma de esta carta fue la condición impuesta por el régimen para permitir a González abandonar el país y buscar asilo en España. A pesar de las negativas del Gobierno español, las palabras de Cabello y la publicación de las imágenes en las que se ve a González firmando el documento junto a Delcy Rodríguez y Jorge Rodríguez, vicepresidente y presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, respectivamente, han añadido más tensión al asunto.
Edmundo González, entre Delcy y Jorge Rodríguez en la embajada de España en Caracas. Fuente: El Debate
El propio Cabello cuestionó cómo González logró salir del país sin un acuerdo previo, argumentando que para permitir el despegue de un avión de la fuerza aérea española desde territorio venezolano era necesaria la autorización del gobierno chavista. “¿Eso no es una negociación?”, se preguntó.
Por su parte, Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional, amenazó a González con revelar más pruebas si no desmentía sus declaraciones sobre las coacciones. Rodríguez afirmó poseer grabaciones de las conversaciones que mantuvieron y no dudó en mostrar imágenes de la firma del documento en la residencia del embajador español, lo que agrava aún más la situación diplomática entre España y Venezuela.
Mientras el Gobierno de Pedro Sánchez sigue negando cualquier tipo de acuerdo, las pruebas presentadas por Venezuela y las declaraciones de figuras clave del chavismo complican la defensa de Sánchez.