Venezuela y su aliado más poderoso, Rusia, firmaron entre el jueves y el viernes acuerdos sobre recopilación de inteligencia y contraespionaje, así como cooperación energética, durante una visita de un alto funcionario del Kremlin a Caracas. El viceprimer ministro ruso, Dmitry Chernyshenko, le dijo a la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, que su país estaba listo para apoyar a las fuerzas armadas de Venezuela con «las armas y el equipo militar más sofisticados», según declaraciones traducidas por la televisión estatal venezolana.
La seguridad y la inteligencia, una materia clave para Venezuela
Los dos países acordaron cooperar en áreas que incluyen «asuntos de inteligencia y contraespionaje», el uso de drones y tecnología de exploración petrolera, dijo el moderador de las conversaciones. Más tarde, en una ceremonia en el Palacio de Miraflores, el presidente Nicolás Maduro dijo que los 17 acuerdos «sellarán y fortalecerán el camino de unión y cooperación» entre Venezuela y Rusia «desde ahora hasta 2030 y más allá».
Rusia promete apoyo incondicional a Maduro
Rusia es uno de los pocos países que ha reconocido la afirmación del izquierdista Maduro de haber ganado un tercer mandato consecutivo en las elecciones del 28 de julio, que fueron cuestionadas por la oposición y luego estallaron protestas generalizadas. Estados Unidos y varios países latinoamericanos han respaldado al candidato de la oposición, Edmundo González Urrutia, como el legítimo ganador, basándose en los detallados resultados electorales publicados por la oposición. Las autoridades electorales venezolanas alineadas con Maduro aún no han publicado un desglose de los votos.
Caracas se acercó a Moscú bajo el liderazgo socialista Hugo Chávez, quien dirigió el país con un gobierno de extrema izquierda y antiestadounidense. desde 1999 hasta su muerte por cáncer en 2013. Esos lazos han perdurado bajo el sucesor elegido por Chávez, Maduro, quien ha defendido la invasión rusa de Ucrania. Venezuela tiene las reservas probadas de petróleo más grandes del mundo y alguna vez produjo más de tres millones de barriles diarios de petróleo, durante mucho tiempo su única fuente notable de divisas.
Tras años de mala gestión y sanciones aplastantes, la producción ha caído a alrededor de un millón de barriles.
