El “hotel okupa” de San Blas, situado en el número 3 de la calle Lola Flores, vuelve a ocupar los titulares tras registrarse un nuevo homicidio. La Jefatura Superior de Policía de Madrid informó que, alrededor de las 18:00 horas del viernes, un hombre de aproximadamente 40 años murió apuñalado. Además, una mujer resultó herida en el mismo altercado, mientras que el presunto agresor, también lesionado, fue detenido en el lugar por agentes de la Policía Nacional.
En noviembre, un ciudadano colombiano fue asesinado en el mismo lugar, un crimen cuyo presunto autor fue capturado recientemente en Barcelona. Además, el inmueble ha sido testigo de múltiples reyertas y detenciones, consolidándose como un foco de inseguridad en el barrio. Hace apenas unos meses, otra tragedia golpeó al “hotel okupa” con la muerte de una mujer por inhalación de monóxido de carbono.
Actuación de los servicios de emergencia
Tras la alerta de los hechos, una ambulancia del Samur-Protección Civil acudió rápidamente al lugar. Los sanitarios confirmaron el fallecimiento de un hombre de mediana edad debido a múltiples heridas de arma blanca localizadas en el tórax y el abdomen. Mientras tanto, en la misma calle, una mujer de aproximadamente 50 años fue atendida por una herida en el brazo izquierdo, también provocada por un arma blanca. Pese a la gravedad de la situación, la mujer permaneció consciente y fue trasladada al Hospital Ramón y Cajal con pronóstico moderado.
Cerca del lugar del homicidio, a unos 700 metros, otro hombre, de aproximadamente 30 años, también fue atendido por los equipos médicos debido a una lesión en la cabeza causada por un arma blanca. Este individuo, consciente y orientado al momento de la intervención, fue trasladado al hospital con heridas leves y posteriormente detenido como principal sospechoso del homicidio y de un intento adicional de asesinato.
El caso ha quedado en manos del Grupo V de Homicidios de la Policía Nacional, que ha iniciado las investigaciones para esclarecer las circunstancias del ataque. Asimismo, miembros del DEVI de la Policía Científica se desplazaron al lugar para realizar un análisis exhaustivo de las pruebas y la escena del crimen. En las proximidades del edificio, se mantiene activo un puesto fijo de vigilancia de la Policía Municipal y Nacional, un esfuerzo que hasta ahora no ha conseguido disuadir los continuos episodios de violencia en la zona.