El Ministerio de Sanidad ha sacado el proyecto de real decreto con el que la ministra Mónica García pretende disminuir el número de fumadores. Para ello, va a introducir el empaquetado genérico, prohibir los aditivos y la reducción de espacios públicos en los que se puede fumar. Aunque los agricultores de tabaco extremeños no están contentos con el plan de Mónica García porque puede que suponga “enterrar el futuro de más 20.000 familias extremeñas” y “sumir en la pobreza y la despoblación a los territorios productores”.
Hay que destacar que Extremadura produce el 98% del tabaco que se cultiva en España, lo que convierte a esta comunidad el tercer productor de tabaco de toda la Unión Europea. Lo que supone que hay más de 20.000 familias en las regiones de La Vera y el Campo Arañuelo que viven del tabaco en España como especifica un comunicado presentado por la organización agraria Unión de Uniones. Así, lo que Unión de Uniones señala es que: “Es razonable que se apruebe un Plan Integral contra el Tabaquismo, con especial énfasis en los más jóvenes, y se afronte el problema de salud pública que genera, pero no a costa de enterrar el futuro de más 20.000 familias extremeñas y sumir en la pobreza y la despoblación a dos comarcas importantes del norte de Extremadura (La Vera y el Campo Arañuelo). A esta situación hay que añadir el cierre previsto para la Central Nuclear de Almaraz que ambas propuestas pueden dejar desierto el Norte de la Región”.
Los agricultores extremeños no están conformes
La Unión de Uniones señala también que: “Denunciamos que el plan que nos presenta señora ministra es el Plan Pfizer para forrarse vendiendo productos para dejar de fumar que contienen nicotina. Alguien del Ministerio de Sanidad debería empezar a dar explicaciones sobre esto”. Esta organización ha recordado a la ministra Mónica García que: “la industria del tabaco está desarrollando nuevas alternativas que, sin dejar de usar el tabaco como base, reducen de manera considerable el daño para la salud pública, al mismo tiempo que suponen un horizonte de esperanza para miles de cultivadores”.
Unión de Uniones añade también que la propuesta presentada por Mónica García, sobre el empaquetado genérico del tabaco: “perjudicaría gravemente los intereses de los cultivadores extremeños”, así como la “equiparación de la regulación de los nuevos productos (vapeadores) a la del cigarrillo convencional, que mataría la única alternativa que puede dar garantía de futuro al cultivo del tabaco en Extremadura”.