En la última semana, del 16 al 22 de septiembre, un total de 2.658 personas migrantes han llegado a las costas de Canarias en 41 embarcaciones, según un informe provisional de la Agencia Efe. La mayoría de estos migrantes desembarcaron en Lanzarote y El Hierro. De los rescatados, 416 son menores de edad y 212 son mujeres, conforme a datos facilitados por Cruz Roja.
Aunque algunos de los migrantes presentaban diversas patologías que requirieron su traslado a centros sanitarios, no se ha informado de casos graves ni de fallecimientos. Los desembarcos han tenido lugar en seis de las siete principales islas del archipiélago, siendo La Palma la única excepción.
Los migrantes son en su mayoría de origen subsahariano y magrebí, y han sido auxiliados por los equipos de rescate y atención en medio de un aumento significativo del flujo migratorio hacia Canarias.
El aumento de llegadas en los meses de otoño
Las llegadas de migrantes a Canarias durante octubre suelen verse favorecidas por condiciones meteorológicas especialmente favorables para la navegación. Aunque el clima en el mar ha comenzado a cambiar, el flujo de cayucos no se detiene. Sin embargo, cada vez es más común que estas embarcaciones lleguen con algún cadáver a bordo o con menos ocupantes que los que partieron. Muchas personas desaparecen en el mar, que se cobra vidas en su travesía.
En 2023, se estima que el número de muertos y desaparecidos en pateras y cayucos rumbo a Canarias podría alcanzar los 868, según cálculos conservadores de la ONU. Esto representa un aumento del 55 % respecto a 2022. Más de la mitad de estas víctimas, alrededor de 444, perdieron la vida en los meses de octubre y noviembre, una trágica tendencia que se agrava en el Atlántico durante ese periodo.
Debido a la llegada intensiva de migrantes a Canarias, agentes de la Policía Canaria, actuando de paisano, han comenzado a trasladar a menores no acompañados (menas) desde el Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) en San Andrés, Valverde, hacia Tenerife. Esta medida ha sido tomada ante la falta de espacio en El Hierro y el inicio de la temporada alta de arribos de migrantes irregulares. Los menores se encontraban en el mismo centro que los migrantes adultos, y el Gobierno de Canarias busca cumplir con los procedimientos legales de protección infantil.
El pasado sábado, 16 menores fueron trasladados a Tenerife desde El Hierro, y se espera que próximamente se movilicen otros 18 menores migrantes. Además, este domingo, un total de 327 migrantes fueron reubicados desde el CATE de San Andrés al CATE de La Frontera y a Tenerife, en un buque de Navieras Armas Trasmediterránea.