Los equipos de emergencias no esperan recuperar más cuerpos del naufragio de un cayuco en El Hierro hasta dentro de tres días, cuando los cuerpos salgan a flote. Este incidente ocurrió ayer noche cuando el cayuco volcó. Así lo informó Fernando Clavijo, presidente de Canarias.
El presidente aseguró que, aunque no esperan rescatar más cuerpos de inmediato, las labores de rescate continuarán. Estas se desplazarán hacia el este de El Hierro, siguiendo las corrientes, en busca de las 54 personas desaparecidas tras el naufragio. Tras reunirse con su equipo, incluyendo al vicepresidente Manuel Domínguez, anunció el envío de más recursos a la isla, como personal policial, sanitario y social. Lamentó la tragedia, que podría convertirse en la mayor crisis migratoria en Canarias en 30 años. Estiman que los cuerpos aparezcan en dos o tres días.
También recalcó los serios problemas logísticos en El Hierro para realizar autopsias y ofreció datos sobre la crisis migratoria: hasta el 15 de septiembre, las llegadas de migrantes han aumentado un 85% en comparación con el mismo período del año anterior, sumando un total de 26.758 personas.
Además, alertó que la ruta atlántica es la más peligrosa del mundo, donde un migrante muere cada 45 minutos intentando llegar a Canarias. Clavijo urgió a buscar un acuerdo inmediato para gestionar este fenómeno, enfatizando que no se debe permitir que lo ocurrido en El Hierro sea solo «otro triste suceso».
Clavijo subrayó la necesidad de que las administraciones públicas encuentren «espacios de encuentro y acuerdo» de manera rápida y ágil, ya que la situación migratoria podría empeorar. Insistió en que todas las administraciones tienen la responsabilidad de ofrecer una gestión «mucho mejor, más adecuada y más civilizada», tanto por respeto al pueblo canario como por las personas migrantes que huyen del hambre y la muerte en busca de refugio en las costas.
Fernando Clavijo expresó que la tragedia es un día muy triste tanto para los afectados como para Canarias y la clase política, señalando que es una evidencia del fracaso en la gestión migratoria. Subrayó que no pueden permitirse seguir fracasando. Informó que ha sido contactado por figuras como Alberto Núñez Feijóo, Ángel Víctor Torres y Manuel Olmedo.
El vicepresidente Manuel Domínguez también calificó el día como «triste y amargo» y describió el naufragio como una «crisis humanitaria en mayúsculas». Hizo un llamado urgente a todas las administraciones, señalando que Canarias no puede soportar más presión.
Considera que se debe enfocar el esfuerzo en los países de origen o tránsito para evitar que más personas arriesguen sus vidas. Domínguez espera que esta tragedia impulse a la política a llegar a acuerdos urgentes y necesarios sobre inmigración.
Manuel Domínguez concluyó su intervención esperando que, al igual que el «grito de Lampedusa» fue escuchado y movilizó a la Unión Europea para ofrecer ayuda, el «grito de Canarias» también sea escuchado en este día, y que se tomen las medidas necesarias para brindar apoyo a la región frente a la crisis migratoria.