Magdalena Nevado, exdiputada por Extremadura de Vox, ha decidido abandonar el partido debido a lo que considera una transformación de Vox en “un club de intereses personales”. En una carta a la que Europa Press ha tenido acceso, Nevado expone las razones que la llevaron a tomar esta decisión, destacando la falta de libertad para exponer opiniones, el sectarismo y las malas formas dentro de la organización.
En su misiva, la exdiputada explica que su decisión fue fruto de una profunda reflexión sobre su trayectoria y sobre la evolución del partido. Recuerda con nostalgia los primeros años en Vox, cuando el Grupo Parlamentario, bajo el liderazgo de Iván Espinosa de los Monteros, se caracterizaba por el trabajo intenso, la dedicación y el compañerismo. No obstante, a partir de mediados de 2023, las dinámicas internas empezaron a alejarse de esos valores fundamentales, especialmente con la creciente imposibilidad de debatir y la negativa al disenso, situaciones que ella ve como señales de un deterioro interno.
Nevado también menciona cómo el partido ha comenzado a priorizar la lealtad personal e interesada por encima del mérito y la capacidad, creando un ambiente de disciplina ciega donde la excelencia queda relegada. La exdiputada critica la protección de aquellos con comportamientos cuestionables y denuncia el trato despectivo hacia quienes se habían ganado su puesto por mérito propio.
Además, hace referencia a las acusaciones de acoso que involucran a Ignacio de Hoces, vicesecretario de Acción Política y diputado por Extremadura, hacia la eurodiputada Mireia Borrás. Aunque ambas partes han negado las denuncias, Nevado revela que intentó proteger a Borrás y a otro compañero al no revelar la situación en su momento, con la esperanza de que la verdad no perjudicara al partido. Sin embargo, ahora lamenta que esa lealtad no haya sido correspondida, lo que le ha causado una decepción personal.
La exdiputada expresa su desilusión por cómo Vox se ha alejado de sus principios fundacionales, y admite que no se reconoce en las nuevas dinámicas del partido. “No es digno para mí quedarme atrapada en estas situaciones”, afirma, criticando el deterioro ético dentro de la organización. Concluye su carta denunciando que Vox ha dejado de ser un proyecto político con ideales claros para convertirse en un club de intereses personales, donde el sectarismo, el oportunismo y la mala educación se han instalado.
Nevado señala que su salida se suma a una serie de abandonos recientes, entre los que se incluyen figuras de peso como Juan Luis Steegmann, Víctor Sánchez del Real y Rubén Manso, todos ellos distantes del rumbo actual del partido.