Imagen: Coches destruidos y amontonado en las calle de Paiporta, tras el paso de la DANA por Valencia en octubre. Davide Bonaldo
Los mortales impactos de las lluvias torrenciales que golpearon la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre fueron enormes: en unas pocas horas, fallecieron 232 personas. Esta cifra supone el 70% de las muertes ligadas a episodios de lluvias torrenciales en Europa en todo 2024, según el Informe sobre el Estado del Clima Europeo de 2024, elaborado por el Servicio de Cambio Climático de Copernicus y la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
El trabajo contó con la colaboración de unos 100 científicos y recopila las tendencias y eventos meteorológicos del pasado año en Europa. El informe, difundido este martes y el cuarto de una serie anual, señala que “Europa es el continente que se calienta más rápidamente” y sus impactos climáticos fueron claros en 2024, que fue el año más cálido jamás registrado, con temperaturas récord en las regiones central, oriental y sudoriental.
El capítulo destinado a las lluvias torrenciales destaca cómo estos episodios “afectaron a unas 413.000 personas” y causaron “la pérdida de al menos 335 vidas”. De ellas, al menos 232 fallecieron en Valencia durante la dana de octubre. Este episodio también concentró la mayor parte de las pérdidas económicas ligadas a inundaciones en Europa el pasado año, que el estudio cifra en “al menos 18.000 millones de euros”.
Pero el informe de Copernicus y la OMM no solo analiza lo ocurrido ya, también lo que se espera para el futuro: “Europa es una de las regiones con el mayor aumento previsto de riesgo de inundaciones”. El panel de expertos señala que se prevé “un aumento de las precipitaciones extremas y las inundaciones de aguas superficiales en todas las regiones de Europa”.
Las temperaturas también aumentan
El informe destaca también que la temperatura de la superficie del mar de la región europea fue la más alta registrada en 2024, con 0,7 grados por encima de la media, y en el mar Mediterráneo, con 1,2 grados más que el promedio. El número de días con ‘estrés calórico fuerte’, ‘muy fuerte’ y ‘extremo’ fue el segundo más alto registrado.
El 60% de Europa experimentó más días que la media con al menos un ‘estrés calórico intenso’. La proporción de generación de electricidad procedente de energías renovables en Europa alcanzó un máximo histórico en 2024, con un 45%. El área de tierra europea que experimentó menos de tres meses de días de heladas resultó ser la más grande registrada, con un 69%, cuando el promedio es del 50%.
Además, el año pasado hubo un número récord de días con al menos ‘estrés por frío fuerte’. Todas las regiones europeas experimentaron una pérdida de hielo. Los glaciares de Escandinavia y Svalbard experimentaron sus tasas más altas de pérdida de masa registradas.
“2024 fue el año más cálido registrado en Europa. Observamos la ola de calor más larga en el sureste de Europa y una pérdida récord de masa glaciar en Escandinavia y Svalbard. Pero 2024 también fue un año de marcados contrastes climáticos entre Europa oriental y occidental”, resumió Carlo Buontempo director del Servicio de Cambio Climático de Copernicus.