La selección del próximo gobernador o gobernadora del Banco de España se encuentra en su etapa final, pero el consenso entre el Gobierno y el Partido Popular (PP) parece cada vez más improbable. Con el mandato de la subgobernadora interina, Margarita Delgado, llegando a su fin el 11 de septiembre, el tiempo para alcanzar un acuerdo se agota. Aún queda por ver si Moncloa mantendrá su preferencia por el ministro José Luis Escrivá o si considerará otras opciones para facilitar un posible acuerdo con los populares.
Tensión y paralización en las negociaciones
Las negociaciones entre el Gobierno y el PP están estancadas desde antes del verano, cuando se rompieron las conversaciones debido a la propuesta del PSOE de nombrar a José Luis Escrivá, actual ministro para la Transformación Digital, como gobernador del Banco de España. Desde el PP, se rechaza esta opción, argumentando que la independencia de la institución se vería comprometida si un miembro del Ejecutivo asume el liderazgo. “Un ministro de carné no puede hacer política monetaria. Pedimos un gobernador con un perfil incontrovertible”, declararon fuentes del PP.
Moncloa y la opción Escrivá
El PP sostiene que el Gobierno no ha propuesto otro candidato aparte de Escrivá, lo que aumenta la posibilidad de que Moncloa tome una decisión unilateral. «No tenemos mucha confianza en el talante democrático de Pedro Sánchez«, señalaron, sugiriendo que el PSOE podría proceder sin el consenso tradicionalmente buscado para estos nombramientos.
Respuesta del Gobierno
Por su parte, el Gobierno parece despreocupado ante las críticas sobre la falta de liderazgo en el Banco de España. La ministra portavoz, Pilar Alegría, aseguró que el Ejecutivo aún está “en plazo” para realizar el nombramiento y garantizó que se seleccionará a alguien con “excelencia e independencia”. Sin embargo, evitó dar detalles sobre la fecha o el nombre del futuro gobernador, insistiendo en que los nuevos responsables tendrán “un magnífico perfil”.