Imagen: Fernando Clavijo, presidente de Canarias-Europa Press
Fernando Clavijo, presidente de Canarias, ha anunciado este lunes una propuesta de decreto para aprobar la distribución extraordinaria de una parte de los 5.700 menores extranjeros no acompañados que están siendo tutelados por el archipiélago, como una medida alternativa a la reforma de la ley de extranjería, que es la fórmula por la que apuesta el Gobierno central.
La propuesta del presidente canario no parece convencer al gobierno central, que duda del encaje legal de una norma que podría ser recurrida ante el Tribunal Constitucional y que tendría que ser igualmente convalidada por el Congreso por los mismos grupos con los que, hasta ahora, no ha conseguido alcanzar un acuerdo.
Según explicó Clavijo en una entrevista en la radio autonómica canaria, su Ejecutivo está trabajando en un decreto con un artículo único en el que se plantea la reubicación de casi 4.000 niños y adolescentes inmigrantes, que es la cifra aproximada que necesitaría Canarias para aliviar un sistema de acogida que se encuentra desbordado, pues sólo tiene capacidad para albergar a 2.000 menores. Se trataría de una alternativa a la reforma del artículo 35 de la Ley de Extranjería negociada entre el Ministerio de Política Territorial y el Gobierno canario, que no consiguió reunir los apoyos suficientes para que fuera tramitada en el Congreso debido a la negativa de PP y Junts.
Tras varias reuniones infructuosas con el PP, todo apunta a que los esfuerzos se están redirigiendo a convencer al partido de Puigdemont, a quien el Gobierno se plantea conceder competencias en materia migratoria. La clave del acuerdo con los independentistas estaría en excluir a Cataluña de ese reparto extraordinario.
El gobierno analizará la propuesta
El gobierno ha asegurado que estudiará la viabilidad legal de la propuesta del presidente canario, aunque no es la fórmula preferida por el Ejecutivo. En primer lugar, porque aprobar ese reparto «puntual» por la vía del decreto no aporta la estabilidad necesaria para una medida de este calado. En segundo lugar, porque puede ser recurrida al Constitucional; y, finalmente, porque aunque se apruebe en Consejo de Ministros, posteriormente tendría que recibir el refrendo de una mayoría del Congreso de los Diputados.
El Ejecutivo central sigue defendiendo que la solución más estable y duradera para aliviar el problema migratorio pasa por la modificación de la ley de extranjería, aunque comprobarán si es factible esta petición puntual del presidente canario.