El Ejecutivo, liderado por Pedro Sánchez, se negó a dragar y limpiar los cauces de los ríos a pesar de que había un evidente riesgo de inundaciones que además se podían dar porque se trata de zonas que a lo largo de la historia sufren riadas, debido a las fuertes lluvias.
Desde que Pedro Sánchez están en el Gobierno de España el criterio de las limpiezas “mínimas” se impuso alegando la prioridad del “respeto medioambiental” de la vegetación y la fauna de ríos que, si pierden su capacidad de desagüe. En caso de que se den riadas por las fuertes lluvias, las consecuencias se convierten en una consecuencia devastadoras para los ciudadanos, la agricultura, la infraestructura pública, las empresas privadas y la agricultura.
Un criterio ciertamente “ecologista” se ha impuesto desde el Gobierno de Sánchez para que se aplique en todos los puntos clave de la geografía española, como por ejemplo en Júcar, una zona que ahora mismo se encuentra devastada por las fuertes lluvias.
Respuesta parlamentaria de marzo de 2023, en la que el Gobierno veta los dragados y obras de corrección de cauces pese al riesgo de inundaciones. Fuente: Okdiario
En marzo de 2023, según ha recopilado el medio OKdiario, el Gobierno hacía público el criterio que se iba a llevar a cabo a partir de ese momento, para proceder a la limpieza de los cauces con carácter general y específicamente, también, en la peligrosa cuenca levantina del Júcar: “Un mínimo de intervención”. Y eso, pese a que en la cuenca del Júcar desde hace años hay identificados, como mínimo, 1.000 kilómetros de cauces declarados Áreas de Riesgo Potencial Significativo de Inundación (ARPSI).
Teresa Ribera en 2023 anunció que los ríos no se iban a limpiar
Tras situar a la socialista Teresa Ribera al frente del Ministerio de Transición Ecológica, el Gobierno presentó los criterios de limpieza de los ríos y que a día de hoy ha quedado demostrado que han sido un fracaso desde el momento en el que se redactó: “El Programa de conservación de cauces, como parte de la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos, es desarrollado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico».
«A través de las confederaciones hidrográficas, para conseguir, con un mínimo de intervención, la conservación y mejora del estado de los ríos, a la vez que minimizar los riesgos de inundación respetando al máximo los valores medioambientales y naturales del dominio público hidráulico”, puntualiza el texto.
Según señaló el ministerio liderado por Ribera el dragado de los ríos quedó totalmente censurado. Si los ríos no tienen, limpiezas en profundidad la “conservación preventiva” de cauces tiene una eficacia escasa de cara a prevenir inundaciones por lluvias torrenciales, pese a que al mismo tiempo el Gobierno, con su recurrente discurso del cambio climático, asegura que cada vez son más habituales los fenómenos extremos como las lluvias torrenciales.