La reciente tormenta DANA que afectó la Comunidad Valenciana ha dejado tras de sí una serie de fuertes acusaciones contra el gobierno de España. Diversos actores políticos, incluyendo Vox, el Partido Popular y figuras independentistas, han denunciado una gestión deficiente por parte de las autoridades, señalando falta de previsión y respuesta ineficaz en un contexto de emergencia climática.
Críticas de Vox y demandas de elecciones
Vox, en un comunicado liderado por su portavoz, denunció lo que llamó “negligencia criminal” por parte del gobierno central. La formación política argumenta que la falta de preparación y de respuesta adecuada para proteger a los ciudadanos ante los efectos devastadores de la DANA demuestra un fracaso en la gestión de emergencias. En este sentido, han exigido no solo responsabilidades políticas, sino también elecciones anticipadas, como una vía para que los ciudadanos evalúen esta y otras actuaciones del gobierno.
Desde Vox sostienen que, aunque las tormentas y el cambio climático suponen un desafío creciente, la falta de previsión y planificación agrava el impacto en zonas particularmente vulnerables como la Comunidad Valenciana. Además, la formación liderada por Santiago Abascal ha planteado que los recursos destinados a la gestión de catástrofes han sido insuficientes o mal distribuidos, especialmente en cuanto a sistemas de alerta temprana y servicios de rescate.
El Partido Popular apunta a la ministra Teresa Ribera
Por su parte, el Partido Popular ha centrado sus críticas en la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera. El portavoz del PP argumentó que Ribera ha demostrado una «negligencia absoluta» en su responsabilidad de velar por una planificación climática adecuada. El PP sostiene que el Ministerio debería haber previsto y mitigado los efectos de la DANA, tomando medidas preventivas y destinando fondos específicos para el mantenimiento de infraestructuras en áreas propensas a inundaciones.
Desde el Partido Popular también señalaron que, en lugar de respuestas claras y coordinadas, el gobierno mostró una gestión desorganizada y lenta en la atención de los afectados, lo cual incrementó las pérdidas materiales y el sufrimiento de la población. Las autoridades valencianas, por su parte, han demandado que se haga una revisión integral de los protocolos de emergencia y de las capacidades de respuesta ante catástrofes.
La posición de Puigdemont y el independentismo
Líderes independentistas, como Carles Puigdemont, también se sumaron a las críticas contra el gobierno de España, argumentando que la respuesta tardía evidencia una falta de atención hacia las necesidades de las comunidades autónomas. Puigdemont coincidió con Abascal en que es esencial una descentralización de los mecanismos de respuesta ante catástrofes para que cada región pueda gestionar de forma más autónoma los recursos de emergencia.
En este sentido, tanto los representantes independentistas como los partidos de derecha coinciden en que se deben replantear los modelos de actuación frente a emergencias como la DANA. Además, Puigdemont ha insinuado que la administración central prioriza intereses políticos antes que las necesidades urgentes de las comunidades autónomas.
Reacción del gobierno
El gobierno, por su parte, ha defendido su actuación, señalando que la DANA fue un evento climático extremo que afectó a múltiples comunidades y que se respondieron a todas las necesidades conforme al protocolo de emergencias. Sin embargo, la falta de medidas preventivas a largo plazo ha sido una crítica recurrente en varios frentes, sobre todo en cuanto a la inversión en infraestructura para áreas con alto riesgo de inundaciones.
El impacto de estas críticas y el creciente clamor por mayor preparación y respuesta ante eventos climáticos extremos sugieren que la gestión de la DANA podría ser un tema relevante en la agenda política en los próximos meses, especialmente en las regiones más afectadas como la Comunidad Valenciana.