Imagen del centro penitenciario de Quatre Camins / Josep García
El número de presos extranjeros en las cárceles españolas ha caído un 35% en los últimos 15 años, pasando de 27.162 en 2009, el máximo histórico, a 17.793 al finalizar en año pasado. También ha disminuido el número de reclusos españoles, en este caso, un 20% en el mismo periodo, según los datos del Anuario Estadístico del Ministerio de Interior, que cifra en 56.698 el total de internos en las prisiones, de los que 39.005 son españoles (48.917 en 2009).
Pese a ello, el número de reclusos extranjeros ha aumentado de un año para otro. A finales de 2023 los reclusos extranjeros representaban el 31,2% del total de la población reclusa, lo que supone un incremento de 1,1 puntos porcentuales respecto a 2022, “dando por finalizado el período de estabilidad observado en años anteriores”, recalca el Anuario.
Aun así, el peso de los internos extranjeros en el total de la población reclusa ha descendido 4,5 puntos respecto a los máximos históricos de 2009. En cualquier caso, y en términos absolutos, el número total de reclusos en las prisiones de España se incrementó en 947 internos, de los que 935 eran extranjeros y 12 españoles.
Presos extranjeros por países y sexo
A cierre de 2023, Marruecos era la nacionalidad más presente entre los extranjeros presos en España, con un 29,5% del total. Por su parte, los ciudadanos procedentes de otros países de la Unión Europea suponían el 16,7% de reclusos, con una mayoría de Rumanía, Portugal, Italia, Bulgaria y Francia. Aun así, la mayor cifra la registraron países que no detalla Interior en su informe.
Respecto al sexo, tanto en el caso de los extranjeros como de los españoles se trata de un dato que no varía: nueve de cada 10 internos son hombres.
Aumenta el porcentaje por violencia machista y sexual
Aunque algo más de la mitad de los presos (el 54,3 %) cumple condena por robos o por delitos contra la salud pública, continúa, de forma ralentizada, el descenso del peso de ambos delitos en el total. De hecho, en los últimos años han perdido 24,9 puntos.
Frente a ello, y en el caso de los hombres, está aumentando el porcentaje de los presos condenados por violencia machista y sexual, cuya suma representa ya el 21,4 % del total y supera el porcentaje de los reclusos por delitos de drogas (15,5 %).
Un 3,2 % de los hombres presos lo están por delitos contra la seguridad vial.
Respecto a las mujeres, una de cada cuatro está en la cárcel por delitos de narcotráfico y cuatro de cada diez por robos. Los datos reflejan un incremento de mujeres internas por delitos violentos como el homicidio (8,9 % del total) y las lesiones (4,5 %).
A 31 de diciembre de 2023 había 250 presos condenados por terrorismo, de los cuales 35 eran mujeres.
Del total, 143 eran etarras (el 59,6 %), 81 reclusos por terrorismo islámico, 14 por pertenecer al Grapo, cuatro a Resistencia Galega y tres por ser de grupos de apoyo al terrorismo.