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El acto inaugural del año judicial que se celebra este jueves llega tras más de cinco años de bloqueo en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), aunque finalmente con un órgano renovado. La nueva presidenta del Consejo y del Tribunal Supremo, Isabel Perelló, pronunciará un discurso que marcará el inicio de su mandato. Sin embargo, este ambiente de celebración se verá ensombrecido por diversas tensiones que rodean al Poder Judicial, como la aplicación de la amnistía, los ataques políticos a jueces, el escándalo del caso Koldo, la investigación a Begoña Gómez y la posible imputación del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz.
Fin del bloqueo en el CGPJ
Durante más de cinco años, el bloqueo del CGPJ dejó en una situación de anormalidad el inicio de los cursos judiciales. Desde 2019 hasta 2022, Carlos Lesmes, entonces presidente en funciones del CGPJ y del Tribunal Supremo, fue el encargado de abrir los años judiciales, marcados por discursos pesimistas ante un bloqueo que parecía interminable. La situación culminó en 2022, cuando Lesmes insinuó su dimisión, que efectivamente se produjo poco después. El año pasado, Francisco Marín Castán, presidente interino del Supremo, tomó la palabra en este acto solemne, mientras que este jueves Isabel Perelló, la primera mujer en la historia en presidir el CGPJ y el Tribunal Supremo, será la encargada de pronunciar su primer discurso como presidenta.
Una elección inesperada y costosa
El nombramiento de Isabel Perelló fue sorpresivo y no exento de dificultades. Tras más de un mes de deliberaciones, los vocales del CGPJ llegaron a un consenso para elegir a Perelló, quien no formaba parte del listado inicial de siete candidatos. La magistrada, especialista en derecho contencioso-administrativo, ha sido reconocida por su independencia y defensa férrea del Tribunal Supremo.
La situación delicada del fiscal García Ortiz
Uno de los momentos más esperados del acto será cuando Perelló pronuncie su discurso ante un público que incluye al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, quien podría enfrentarse a una posible imputación por un presunto delito de revelación de secretos. Este caso se originó cuando García Ortiz ordenó la publicación de una nota de prensa detallando la situación procesal del novio de Isabel Díaz Ayuso, investigado por fraude fiscal. Aunque el fiscal general ha admitido haber autorizado la nota, niega que esto constituya un delito. Sin embargo, si es imputado, García Ortiz se encontraría en una situación inédita en la historia democrática de España.
Escándalos políticos y judiciales
El Poder Judicial también afronta este año nuevas tensiones, especialmente con los ataques políticos hacia jueces y el cuestionamiento de su independencia. Estos problemas se han visto exacerbados con el caso Koldo y la investigación a Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Ambas investigaciones han colocado al Poder Judicial en el centro del debate político, destacando el pulso entre jueces y políticos en un contexto de alta tensión.
Mientras continúan las comisiones de investigación sobre la corrupción durante la pandemia, el caso de Begoña Gómez avanza en el Juzgado de Instrucción de Madrid, lo que llevó a Pedro Sánchez a reflexionar sobre su permanencia al frente del Ejecutivo. Aunque finalmente decidió continuar, el presidente ha presentado una querella contra el juez del caso por prevaricación. Ahora, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid debe decidir si admite a trámite esta querella, lo que promete mantener el foco mediático sobre este caso en los próximos meses.