Este jueves en Bucarest, Rumanía, durante el Congreso del Partido Popular Europeo, ha intervenido el presidente del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo. El líder del PP ha tocado varios temas importantes en esta sesión.
En primer lugar, cabe destacar las declaraciones que Feijóo ha realizado en favor de Ucrania y que ha defendido el apoyo militar desde Europa al Gobierno de Zelenski para rechazar la invasión por parte de Rusia.
A pesar de este inciso inicial, la intervención de Feijóo se ha centrado en la Ley de Amnistía, cuya aprobación tendrá lugar este mismo día en el Congreso de los Diputados. En primer lugar, el popular ha agradecido a sus compañeros europeos la resolución sobre el Estado de derecho en la Unión Europea impulsada por el PP español, aprobada este miércoles en el congreso del PPE en Bucarest, en la cual se ataca a la Ley de Amnistía plateada por el PSOE con el apoyo de Junts per Catalunya y ERC.
En este sentido, también ha salido a atacar al Gobierno español e intentar conmover a Europa «Hoy un gobierno europeo va a dejar impunes delitos gravísimos contra el corazón de la UE, incluidos delitos de terrorismo, malversación de dinero público y declaración de independencia». Y critica a «un gobierno cada día más acorralado» por «quienes ponen como precio el Estado de Derecho».
Un punto de vista opuesto al del PSOE
Esta versión de la amnistía como vulneración del Estado de Derecho choca frontalmente con las declaraciones que el Ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes de España, Félix Bolaños, ha realizado minutos después delante del Congreso. En el discurso del ministro socialista, se han puesto de relieve los acuerdos realizados ayer, miércoles 6, por la tarde. «Finalmente, ayer las negociaciones acabaron con éxito» señalaba Bolaños.
Bolaños también ha resaltado que «con esta ley se cierra una etapa de enfrentamiento, confrontamiento y tensión que protagonizaron una década» y asegura que «va a ser una ley que se va a convertir en un referente internacional». El PSOE desde el inicio ha defendido que la Ley de Amnistía que quieren aprobar se encuentra dentro del marco constitucional nacional y europeo, en palabras del ministro «absolutamente conforme a la jurisprudencia europea».
Finalmente, ha destacado que «la voluntad es que todas las personas involucradas en el proceso independentista queden amnistiadas», pero ha preferido no entrar a valorar nombres concretos de los instigadores del procès.