Barricada de los funcionarios de prisiones/RTVE
Tras el asesinato de una cocinera de la prisión de Mas d’Enric, en El Catllar (Tarragona), los funcionarios de prisiones protestan por las precarias condiciones laborales en las que se encuentran.
El suceso ha provocado una oleada de manifestaciones y protestas en Cataluña. Los funcionarios de prisiones han cortado carreteras y montado barricadas para reclamar por una mejora de sus condiciones. Está prevista una reunión con el Departamento de Justicia de la Generalitat pero los sindicatos piden previamente la dimisión de la consellera y del responsable de prisiones.
Cortes en los accesos a centros penitenciarios.
Los funcionarios de prisiones inician este lunes por la mañana el corte de acceso a cinco centros penitenciarios de Barcelona, Lérida y Tarragona. Todo ello en señal de protesta por la muerte de una cocinera la semana pasada presuntamente a manos de un preso que después se suicidó en la cárcel Mas de Enric del Catllar (Tarragona).
Los cortes comenzaron sobre las 6:30 horas en las cárceles de Brians 1, Brians 2, Quatre Camins (Barcelona), Ponent (Lérida) y Mas d’Enric, según los sindicatos. La Generalitat ha convocado para este lunes a las 09.00 horas a los representantes sindicales de los funcionarios penitenciarios para abordar la situación de las protestas. Por su parte la que el portavoz de UGT Prisons, Xavier Martínez, anuncia que no acudirá a la reunión ya que no se han dado las dimisiones demandadas.
En la reunión está previsto que participen, por parte de la Conselleria, el secretario general del Departamento de Justicia, Jordi Martinoy; la secretaria de Administración y Función Pública, Alícia Corral; y el director general de Asunto Penitenciarios, José María Montero. Fuentes de la Conselleria han precisado que en la reunión no participarán otros cargos que sí lo hacían hasta ahora, como el responsable de las prisiones catalanas, Amand Calderó.
La convocatoria se produce después de que la consellera haya afirmado este domingo en rueda de prensa que «no se pueden repetir» nuevos bloqueos en los accesos a las prisiones y de que no haya descartado la intervención de los Mossos para impedirlo. Esas declaraciones son tildadas por los sindicatos de «amenaza» y «vergüenza».