Cristina Álvarez, asesor de Begoña Gómez en Moncloa, no tiene conocimiento de si existe un documento que especifique las funciones de su cargo. Álvarez ha comparecido este viernes ante el juez del Tribunal Supremo, donde ha explicado que sus funciones pasan por asistir a la esposa del presidente del Gobierno en su agenda personal y privada.
La asesora de Begoña Gómez ha declarado ante el juez que nunca ha realizado trabajos relacionados con la Universidad Complutense de Madrid. Según fuentes a las que ha tenido acceso The Objective, la directora de Programas de la Secretaría General de Presidencia ha señalado que si escribió a patronos de la polémica cátedra para que mantuvieran el apoyo económico a su jefa fue para hacerle “un favor personal”.
Álvarez ha subrayado durante su declaración que el cargo que ocupa ya existía con otros presidentes y que fue la propia Begoña Gómez quien la propuso por su amistad previa. Según fuentes presentes durante la comparecencia, el magistrado que investiga a su jefa por cuatro delitos le ha llamado la atención en repetidas ocasiones. Además de apercibirla por no contestar, le ha pedido su teléfono móvil, según testigos presentes en el interrogatorio. El fiscal ha rechazado formularle preguntas.
La compareciente ha señalado que está en su cargo desde el 16 de julio de 2018. Un mes y medio después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, llegara a La Moncloa. Posteriormente, Begoña Gómez se puso en contacto con ella debido a que era una persona de confianza.
La asesor de Begoña Gómez comenzó a trabajar con ella porque era «una persona de confianza»
A pesar de esta situación, Cristina Álvarez desconoce si existe un documento o si en su contrato se especifican las tareas que tiene encomendadas. Ha subrayado que siempre le dijeron lo que tenía que hacer y que se trataba de un cargo de confianza por el que cobra 49.000 euros anuales.
Según The Objective, entre sus labores destaca la búsqueda de “un entorno seguro, eficiente y discreto” para la esposa del presidente del Gobierno. Álvarez ha insistido en que está a disposición 24 horas y debe controlar “toda su agenda”. En función de las actividades que tenga Begoña Gómez, la asesora tiene que informar a diferentes estamentos, como al equipo de seguridad.
Cristina Álvarez ha explicado también que es la encargada del protocolo, las ceremonias, hace informes y le pone en contacto con otras personas, pero ha rechazado que realizara trabajos para la Complutense, a pesar de los correos electrónicos intervenidos por la Guardia Civil.