Carles Puigdemont, ex presidente de la Generalitat de Cataluña y líder del partido Junts, ha publicado un artículo de opinión en Político, una de las webs más prestigiosas a nivel internacional, donde narra su reciente y breve retorno a territorio español. En su texto, Puigdemont no solo revela detalles sobre cómo logró ingresar y salir del país sin ser detenido, sino que también lanza duras críticas al sistema judicial español, acusándolo de perpetrar lo que él denomina un «golpe de Estado híbrido».
El pasado 16 de agosto, Puigdemont cumplió su promesa de regresar a España, coincidiendo con el día de la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat. A pesar de contar con una orden de detención vigente, el líder independentista logró eludir a la Policía y abandonar el país tras unas pocas horas en suelo catalán.
En su artículo, Puigdemont relata su «audaz huida», aclarando que su objetivo no era entregarse a las autoridades, sino «ejercer el derecho a resistir la opresión». Según explica, decidió regresar a Cataluña para participar en el pleno de investidura, pero descartó esta idea debido a la presión policial.
El líder de Junts centra gran parte de su escrito en criticar la actuación de la Justicia española, acusándola de subvertir la voluntad popular y anular la legislación aprobada democráticamente. Puigdemont señala que la no aplicación de la ley de amnistía en su caso es un ejemplo claro de lo que considera una «distorsión de la realidad» por parte de los jueces.
«La ley de amnistía se aprobó a finales de mayo, pero no se ha aplicado en mi caso por la imputación de malversación que aún pesa sobre mí», escribe Puigdemont, refiriéndose a la legislación que debería haber beneficiado a varios líderes independentistas. En su opinión, es absurdo que una ley de amnistía no pueda conceder amnistías, y ve en ello una burla hacia los legisladores que la aprobaron.
Puigdemont califica la actitud de los jueces como un desprecio a la ley y al proceso democrático, argumentando que lo que sucede en España sería impensable en cualquier otro país de Europa. Según él, esta situación revela un «problema sistémico del poder judicial español», al que acusa de actuar en contra de los principios democráticos.
En su relato sobre cómo logró salir de España sin ser capturado, Puigdemont desmiente las versiones que indicaban que se escondió en el maletero de un coche. «No hubo necesidad de esconderme en el maletero de un coche, como afirman que hice», aclara. En su lugar, explicó que simplemente se sentó en la parte trasera de un vehículo privado, que lo llevó a través de la frontera entre el sur de Cataluña y el norte de Cataluña, territorio administrativamente francés.
Finalmente, Puigdemont concluye su artículo con una reflexión sobre la necesidad de que la «Justicia» regrese a los tribunales españoles, con la esperanza de que algún día pueda regresar a su hogar en Cataluña sin el riesgo de ser detenido.