El Ibex 35 ha firmado este martes una caída del 2,22%, hasta situarse en los 10.854,4 puntos, en su peor sesión desde la crisis bancaria de marzo de 2023, que se llevó entonces por delante a varias entidades regionales de Estados Unidos, además de propiciar la absorción de Credit Suisse por parte de UBS.
La jornada, plagada de referencias empresariales y macroeconómicas, ha estado condicionada por la caída de la banca: BBVA se ha desplomado un 6,65%; Banco Santander un 3,74% y Caixabank un 3,24%. El principal indicador del mercado español ha echado el cierre a abril con una caída del 1,99% que le ha hecho despedirse de los 11.000 enteros, una cota que ha conseguido superar en momentos puntuales del mes, hasta el punto de situarse en máximos inéditos desde 2015.
Los mercados han cotizado este mes en un contexto marcado por las tensiones de Oriente Medio y los malos datos macroeconómicos de Estados Unidos en cuanto a la inflación y el crecimiento, que han propiciado un cambio de perspectiva por el que ya no se esperan recortes de tipos de la Fed para junio, escenario que sí aguanta para el BCE, sino para finales de año.
Destaca que BBVA ha reconocido estar estudiando una posible fusión con Banco Sabadell y ha contratado a varios asesores para analizar la operación, según ha informado el banco en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De su lado, Banco Sabadell también ha reconocido que ha recibido la propuesta y que está estudiándola. El banco resultante de la fusión de BBVA y Banco Sabadell superaría a CaixaBank como el mayor banco de España, sin tener en cuenta los negocios en el exterior, de acuerdo con los datos de balance de las entidades financieras.
BBVA se ha desplomado un 6,65%
Además, han continuado los resultados empresariales en España, con la publicación de dos grandes bancos: Santander ha informado de que obtuvo un beneficio atribuido de 2.852 millones de euros en el primer trimestre de 2024, un 11% más en euros corrientes con respecto al mismo periodo del año anterior, mientras que CaixaBank cerró el primer trimestre del año con un beneficio neto atribuido de 1.005 millones de euros, un 17,5% más que en el mismo periodo del año pasado.
De este modo, la gran banca española ha continuado mejorando sus resultados en el primer trimestre de 2024, pulverizando las ganancias que obtuvo el año pasado, al alcanzar un beneficio neto conjunto de 6.676,8 millones de euros, un 17,2% más que en el mismo periodo de 2023.