El número de trabajadores dados de baja durante el periodo de prueba en contratos indefinidos ha experimentado un aumento significativo después del impacto del coronavirus y la implementación de la reforma laboral.
Más de 700.000 ceses de la afiliación
Según datos proporcionados por los ministerios de Trabajo y Seguridad Social, el año pasado se registraron un total de 702,802 ceses de afiliación a la Seguridad Social por esta razón, lo que representa un aumento del 430% en comparación con el año 2019, el último año previo a la pandemia.
Mayor supervisión por parte del ministerio
Este incremento en los ceses durante el periodo de prueba constituye el aumento más notable en términos relativos en comparación con otras causas de baja monitorizadas por la Seguridad Social. Estas cifras han motivado una mayor atención por parte de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, quien ha ordenado una mayor supervisión por parte de la Inspección de Trabajo para detectar posibles casos de “fraude” en el uso de los periodos de prueba.
Auge de la contratación indefinida
El análisis revela que el incremento en los ceses durante el periodo de prueba en los contratos indefinidos puede explicarse, en parte, por el auge en la contratación indefinida que ha tenido lugar tras la reforma laboral. En 2023, se firmaron 6.6 millones de contratos indefinidos, lo que triplica la cifra del último año anterior a la crisis del COVID-19. Esta mayor contratación también ha resultado en un aumento en las bajas, que se han triplicado en comparación con el año 2019.
Aumento de los fijos discontinuos
Sin embargo, los motivos de baja en la afiliación han experimentado un crecimiento aún más pronunciado en términos relativos que el resto: el no superar el periodo de prueba (+430%) y el paso a inactividad de los trabajadores fijos discontinuos, que ha aumentado un 400%.
Una posible práctica fraudulenta
El incremento en los ceses durante el periodo de prueba plantea interrogantes sobre posibles prácticas fraudulentas por parte de algunas empresas para evitar costes. Esto ha llevado al Ministerio de Trabajo a reforzar los controles de la Inspección de Trabajo para identificar qué empresas realizan más despidos durante este periodo y, en caso de detectar irregularidades, imponer sanciones.